¡Hola
mi dulce amor! Sé que en muchos países europeos, entre ellos Alemania, ya se
han terminado las vacaciones de navidad y habéis vuelto al trabajo. Aquí en
España todavía nos queda la festividad de Reyes el próximo día 6 y aún se
conduce bien y se nota que los niños no han regresado a la escuela.
Ayer a las 16:30 te puse el relato y poco después me empezó a doler un poco el corazón. A las 17:17 escribí en mi colour note que había escuchado el Max Mix 7 que me transportó al último trimestre de 1988, mis 18 años recién cumplidos que me hicieron rememorar una etapa en el instituto fantástica y con el recuerdo de la primera vez que me enamoré platónicamente. Escuchar títulos como Yeke Yeke, The race o The only way is up me hicieron pensar que ya han transcurrido nada más y nada menos que 36 años y que con la música, la memoria te trae momentos inolvidables. Decidí salir a pasear y no dejaba de cantar en voz alta las canciones del megamix, suspirando de nostalgia.
Hice una pausa en la calle de los eucaliptos y a las 18h vi cuatro matrículas con las iniciales de tu nombre y apellido en apenas 30 segundos. Fue entonces cuando durante breve espacio de tiempo, noté malestar estomacal. Una hora más tarde me dolía un poco el corazón y me preguntaba si estabas solo, aunque ya sabía la respuesta. Antes de las 20h te puse imágenes de Good Evening pero me llegaba la sensación que no podías contactar. La desconexión fue total y no tenía ni ganas de cenar y además no dejaba de bostezar. Me sentía muy cansada y a las 21h me fui a dormir. Antes de poder cerrar los ojos, no podía sacarme de la cabeza un texto que había leído y que me había impactado muchísimo.
Decía que el útero de la mujer sabe perfectamente el Pimmel que es adecuado, con el que se siente a gusto, y los que no son apropiados, envía señales de rechazo tales como infecciones, enfermedades de transmisión sexual y otros síntomas que las mujeres sufrimos en silencio. Y recordé cuando estaba con mis parejas que mi corazón ya me gritaba y me decía: ¡No, este no es! No pude evitar pensar en la sensación de sentirte dentro de mí, aunque sea astralmente y no físicamente, pero ya te lo conté una vez, cuando desperté aquel 13 de noviembre del 2014, mi cuerpo entero, mi mente, mi sexo, sabían que te habían encontrado. Y pensando en ti con mucha nostalgia, logré dormirme.
Hoy he dormido bien, tan solo me he despertado a la una pero enseguida he recobrado el sueño. Me he dado una ducha rápida cuando me he levantado a las 6:30 y después te he puesto imágenes de Good Morning. A las 6:54 he sentido una súbita tristeza y ganas de llorar, pero ya no sabía si eras tú o era yo. Al salir a la calle a las 7:14 estábamos a 4º pero la sensación de frío era intensa. He ido a ver a los hermanos de Hans y han venido los dos, el macho y la hembra y les he puesto comida. Me han hecho sentir una felicidad inmensa, teniendo en cuenta el frío que hacía y que no tengan mantas ni estufas. A las 7:41 estaba en el coche a punto de regresar a casa, y de nuevo he sentido muchas ganas de llorar. Ya en casa he ido a comprar el pan y a las 8:21 he notado un ligero malestar estomacal pero ha sido breve. Me he preparado una tortilla de especias, un café y un Rooibos y después de desayunar he mirado tu social media.
De pronto a las 9:36 he notado mi chakra corazón muy abierto. Pero pocos minutos después, a las 9:43 de nuevo me ha abordado ganas de llorar pero de forma reprimida además de mucha angustia, como si tuvieras que apretar los labios porque no estabas solo. No he podido evitar ponerte una imagen de Christian y Anastasia con lo que estaba sintiendo entonces. A las 10h he salido con mi madre a comprar y alrededor de las 10:30 me ha dolido el corazón pero ha sido efímero. Pero justo antes de llegar a casa a las 11h el dolor ha retornado pero con mucha intensidad, con unos pinchazos en el pecho que me hacían gritar en silencio, era excruciating y casi insoportable. No comprendía qué te ocurría y he mirado tu social media. He estornudado dos veces mientras te confeccionaba un collage diciéndote lo que estaba sintiendo. Tengo la sensación que captas mi telepatía, mis sentimientos y tristeza profunda por algo que no me atrevo a comentarte.
Al mediodía he conectado el ordenador y a las 12:22 he notado tristeza pero de forma fugaz. He ido a la terraza un momento a las 12:48 y ha vuelto a dolerme el corazón y me ha llegado un súbito pensamiento sobre una imagen que puse en mi social media de numerología. A veces sé que adivino cosas pero yo me limito a analizar los números y fechas de nacimiento entre varias cosas. También he pensado en imágenes, sobretodo collage que pongo en mi social media preferida, donde hago montajes de forma imaginativa y luego me doy cuenta que es como si captara la realidad. Mientras tomaba el Afternoon Coffee he puesto imágenes y a las 14:50 he notado un poco de dolor en el corazón, pero te notaba distante y ocupado. Mientras lavaba los platos ha sonado una cantante española llamada Amaia Montero que ha estado alejada durante dos años de los escenarios, por temas de salud. Al poner una canción suya en la radio, me he acordado de una llamada “Darte mi vida” que sonaba muchísimo en el restaurante de la ZAL en febrero del 2015. La lyrics parece que la haya escrito yo, me siento muy identificada. Espero estés bien, de salud y ánimo. Pass auf dich auf mein Liebling. Te quiero mi precioso alemán.
Eternamente tuya,
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