Un día gris y triste

 

¡Hola mi dulce amor! Hoy tengo muy poco que explicar y apenas noto tu presencia. Seguramente estás pasando unas vacaciones fantásticas, aunque por lo que siento dentro de mí, parece todo lo contrario. El día está nublado, no estoy muy animada y tan solo los paseos con Rufo y la compañía de mis gatos, me hacen sonreír un poco.

Ayer te puse el relato a las 15:30 y posteriormente fui a coger el autobús. Cuando eran las 16:09 noté débiles love sparks pero también dolor en el corazón. A las 16:45 ya estaba con el perro y enseguida me percaté que estaba muy nervioso y alterado. No sé qué le pasaba pero estaba indomable. A las 16:50 estábamos paseando por el parque de las palmeras y empecé a notar nauseas estomacales. Diez minutos más tarde sentí dolor en el corazón y sospeché que estabas leyendo el relato. A las 17:07 vi dos matrículas 222 con un minuto de diferencia y te escribí I love you. A las 17:33 me sentía extraña, como si una energía pesimista y triste me hubiera invadido.

Vi una matrícula 4444 en ese momento y pensé que era la señal que necesitaba, un apoyo invisible que me dijera que todo iba a salir bien. A las 18h llegamos a casa y el perro continuaba alterado, incluso empezó a morder con rabia un cojín que había en el suelo. Era como si se sintiera frustrado, como si empezara a darse cuenta que su dueña aún tardaría días en volver y la herida de abandono fuera cada vez más grande. Puse la música de Mozart y por iniciativa mía empecé a darle un masaje, a la misma vez que notaba todavía dolor en mi pecho. A las 18:24 cuando estaba esperando el tranvía, me empezó a doler la barriga, pero fue a las 18:50 que el dolor era muy intenso. Me preguntaba qué te pasaba, si todo iba bien cerca de ti.

A las 19:15 llegué a casa y me sentía agotada. Me metí en la cama y miré la tele un rato. A las 20h te puse imágenes de Good Evening pero te notaba lejísimos y con la imposibilidad de contactar. Sin embargo a las 20:22 pensé en ti y de repente mi pecho se llenó de fuego pero también el dolor era excruciating. Era como si una herramienta me arañara una herida abierta en carne viva. Escocía muchísimo, dolía una barbaridad, casi me quitaba la respiración. Por suerte apenas duró esta sensación un par de minutos. A las 22h me fui a dormir y enseguida mis ojos se cerraron y desconecté de todo y de todos.

Hoy me he levantado a las 6:20 y no me dolía nada. Igual que ayer, me he tomado un café y me he dado una ducha rápida y a las 7h he cogido el autobús. En ese momento me ha dolido un poco el corazón y es que estaba leyendo que el 2025 será parecido al 2016. En mi caso no fue un año tan bueno como el 2015 ni tan malo como el 2014 pero tuve cambios, como el traslado de mi empresa desde la ZAL a la población donde vivo yo. Ese año fue la única vez que me fijé en otro chico que me hizo olvidarte unos meses, un conductor de autobús que se parecía mucho a ti. Fue una vía de escape para no sufrir tu ausencia. Y ahora es cuando recuerdo unas fotos que han cobrado sentido y me han recordado el channelling donde leí que tras la separación, cuando volviste a Alemania, el DM lo pasó mal y sufrió una tortura silenciosa. Recuerdo una imagen en blanco y negro en marzo del 2016 donde parecías muy triste y que me rompió el corazón. Después otra en julio del 2016 donde estabas en un lugar de vacaciones y llevabas una cámara de fotos y gafas de sol y comprobé lo delgadísimo que estabas. 

Y la última en agosto de ese mismo año, montado sobre un elefante y donde creo que fueron unas vacaciones para escapar de una realidad que no te gustaba. Ese año tenías el número 7 igual que el que vas a tener en el 2025 y me gustaría equivocarme, pero tengo miedo que sufras una depresión. A las 7:37 ya estaba con Rufo que parecía más calmado que ayer y hemos ido a la montaña de Sant Pere Mártir. Las hierbas estaban húmedas por el rocío matinal y el perro ha disfrutado muchísimo. Lo único es que estaba nublado y no hemos podido ver la salida del sol en el horizonte del mar. De repente a las 8h he empezado a notar muchos jugos gástricos en mi barriga además de malestar estomacal. La temperatura era de 8º y casi sobraba la chaqueta. Después de caminar 90 minutos, a las 9:07 he dejado a Rufo en su casa y he regresado a casa. He llegado a las 9:45 y mientras estaba desayunando a las 10h, de nuevo mucho malestar y mi barriga revuelta. 

A las 11h he conectado el ordenador pero estaba muy desmotivada, no me sentía atraída por nada. He mirado tu social media y poco después he visto que eran las 11:11. He ido a la terraza con los gatos y poco antes del mediodía, cuando me dolía el corazón, he salido a comprar un momento. A las 13h he vuelto a sentir malestar estomacal y dolor en el corazón. He mirado un video tuyo para escuchar tu voz, pero en lugar de alegrarme, me ha entristecido todavía más. De aquí un rato me voy a una comida familiar. Hoy en Catalunya se celebra Sant Esteve y son muy típicos los canelones rellenos de carne. Por suerte tengo la excusa de que por la tarde tengo que ir a ver a Rufo. Hay lugares donde te sientes incómoda y deseas alejarte cuanto antes mejor. Pass auf dich auf mein Liebling. Te quiero mi precioso alemán.

Eternamente tuya,