martes, 31 de diciembre de 2024

Feliz 2025

 

¡Hola mi dulce amor! No tenía muchas ganas de escribir, no me siento motivada ni con fuerzas pero pensaba que era una manera terapéutica de terminar un año 2024 que comenzó bastante positivo pero se fue torciendo al pasar los meses, especialmente a partir de verano. No se ha roto el vínculo entre nosotros dos, eso jamás se perderá, pero donde antes había un fuego ardiente, un sol brillante, una luz poderosa, ahora tan solo titila una minúscula llama de una torcida vela. Sigo sintiendo dolor en el corazón cada día, te noto triste y capto tus pensamientos y también atenazan triggers que es como echar alcohol en una herida abierta en carne viva, duele mucho. Por lo menos antes pasábamos los mismos dolores y sufrimiento pero compensaban las love bubbles, los orgasmos cósmicos o una felicidad inmensa cuando se entrelazaban nuestros chakras.

Ahora no tan solo hay obstáculos sino circunstancias que han cambiado nuestras vidas, especialmente la tuya. Supongo que la alianza de casado es un fuerte recordatorio cuando tu cuerpo desea unirse astralmente, o los votos que prometiste en tu boda, o el miedo de ser descubierto en una actitud que hasta a mí me pondría celosa si fuera tu esposa. Creo que el universo nos está separando para que busquemos nuestros caminos. Yo todavía estoy muy perdida pero veo señales. Intento distraer mi mente, ya sea con Rufo, con los gatos callejeros que nutren mi alma y me hacen sonreír, dándome un capricho de comer chocolate con churros después de caminar 6 km seguidos o ver en el cine una película trepidante y espectacular que te hace olvidar todas las preocupaciones durante 2 horas.

En ocasiones todavía tengo esperanzas de volver a verte, de pasar una noche loca los dos juntos pero entonces despierto y me doy cuenta que eso solo ocurre en los libros románticos y en algunas películas y que la realidad es bien distinta. Me gustaría viajar a algún lugar lejano, antiguo, donde las piedras de un castillo o catedral tengan más de 500 años. Sin embargo ahora hay otras necesidades y prioridades y todo queda en un sueño lejano. Muchas veces no puedo evitar pensar que Hans Blumenthal y tú os parecéis en muchas cosas y una es la fuerte influencia que ejercen miembros de la familia a la hora de seguir unas normas, tradiciones o simplemente para aparentar. Tú estás más despierto espiritualmente que mucha gente que te rodea y eso te causa conflictos y dudas y lo comprendo.

Hace un mes mi sobrina Laura rompió con su novio y cuando la vi hace unos días en la comida familiar, todavía estaba bastante triste. No se lo dije pero las fotos que pone en su perfil de whatsap dicen mucho más que las palabras. Al principio puso una imagen en blanco y negro, como si estuviera de duelo. Posteriormente puso una de niña, cuando tenía unos 8 años y la acompañaba su perra Luna. La última que ha puesto es siendo una niña pequeña, de unos dos o tres años. Es una señal de que añora esa etapa de su vida donde no había problemas, todo eran juguetes, mimos y diversión y donde te sentías protegido y te lo daban todo. A veces mirando perfiles en las redes sociales, hay mucha gente que sonríe, que luce ropa cara y se divierte en fiestas o vacaciones, pero hay pequeños detalles que pasan inadvertidos para la mayoría de la gente pero que a mí no se me escapan. Y no es oro todo lo que reluce.

Hoy mis ojos hablan solos pues dos personas ya me han preguntado esta mañana si estaba bien. He sonreído pero en el fondo estoy muy triste. Como hace un año, he ido a ver los hermanos de Hans que me han hecho muy feliz y después he estado 30 minutos en la biblioteca pero ni tan solo me apetecía mirar internet. No soy la única que está un poco melancólica. La gente por la calle está muy apagada. He leído que esta luna negra, la segunda luna nueva en diciembre, ha purgado mucho. A mí la temporada de capricornio me afecta mucho, igual que los otros signos de tierra, en mayo con tauro y en septiembre con virgo. Y creo que a ti también. Los últimos días desde Navidad se han producido cuadraturas y oposiciones muy intensas y a todos nos ha salpicado. Hace un rato pensaba en muchos finales de año de mi vida, y ha habido algunos fantásticos y otros para olvidar. A lo largo del día me ha dolido bastante el corazón en momentos breves pero dolorosamente intensos. Deseo que seas muy feliz con tu familia, tengas salud tú y los tuyos y prosperidad en el trabajo. Cuídate, Take care, pass auf dich auf mein Liebling. Te quiero con toda mi alma y corazón, a pesar de no poder verte, besarte ni abrazarte.

Eternamente tuya,

 


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