El amor verdadero no se olvida

 

¡Hola mi dulce amor! Me he dado cuenta que por mucho tiempo que haya pasado, hay recuerdos que no se acaban de cerrar y realmente si amas de verdad a una persona, jamás puedes olvidarla.

Ayer te puse el relato y alrededor de las 16:42 noté mariposas en el plexo. A las 17:10 sentí como si me estuvieras abrazando y deseaba besarte. También te echaba mucho de menos. Salí a pasear y no dejaba de ver matrículas con el número 333 y me acordé que al mediodía en el supermercado, el importe del ticket había sido 13,33 €. Fui un momento al hospital pero solo para ir al lavabo y solté mucho flujo vaginal. Continué caminando y de repente a las 18:11 sentí muchas ganas de llorar y te escribí preguntándote qué te ocurría. Me llegó una visión de una persona que dijo una frase muy desagradable y estaba muy enfadada pero no se dirigía a ti, sino a mí, pero tú sufrías. Intenté borrar esas imágenes de mi cabeza, pensé que era mi imaginación pero en el fondo de mi corazón sabía que si lo había visto y escuchado era por una razón. Llegué a mi casa a las 19h y se me ocurrió coger la libreta para leer lo que escribí el 5 de agosto del 2015. Tengo la suerte o la desgracia, que siempre describo mis sentimientos y sensaciones de forma muy detallada, por lo que cuando lo vuelvo a leer, a pesar del tiempo transcurrido, es como si estuviera viendo una película. Leí el 5 de agosto del 2015, describiendo la felicidad inmensa que sentí al verte en el restaurante y cuando me saludaste, lo guapo que estabas con tu jersey blanco y además te habías cortado el pelo. Y saboreabas un helado, un sándwich de nata y al parecer era de tus favoritos pues lo habías repetido varios días.

También escribí que en mi casa mi padre se dio cuenta de mi felicidad, de lo contenta que estaba y mi madre le dijo que yo estaba enamorada de un alemán. Y mi padre le dijo a mi madre, que jamás me había visto de esa forma y yo le dije que nunca me había sentido igual, tan locamente enamorada de alguien. Después hubo una pausa justificada y no volví a escribir hasta el 9 de agosto. Tuvieron que pasar 72 horas para digerir que te ibas para siempre a Alemania, el dolor visceral e insoportable que sentí cuando Jaime en el restaurante me lo dijo. Cómo lloré aquella tarde, las pesadillas que tuve por la noche, las canciones que sonaban en la radio que me provocaban el llanto. Después de leer esas hojas, sentí tristeza y amargura pero después sonreí al pensar que el destino nos tenía reservadas varias sorpresas inimaginables. A las 19:46 sentí ganas de llorar y fue como si tú hubieras atrapado mis pensamientos, captaras mi telepatía y hubieras leído conmigo esos extractos de mi diario de hace justo ahora 8 años. A las 20h te puse imágenes de Good Evening pero no sentí tu presencia hasta las 20:49. Te dije que pensaba que estabas ocupado, feliz, con más gente pero me llegó una fuerte melancolía y ganas de llorar y yo te besé con amor y te escribí Te quiero. Fue la última vez que noté tu presencia, era como si no pudieras contactar y sin ganas ni de mirar la tele, a las 22:40 me fui a dormir.

Hoy me he despertado a las 7:25 después de haber dormido toda la noche. Una temperatura de 20º ha ayudado a conciliar el sueño. Lo primero que he pensado ha sido que hoy era el cumpleaños de Hans Blumenthal y pensaba que el mes de agosto fue muy especial para él y para Felix, ya que el judío celebraba su cumpleaños el 5 de agosto, Felix Kramer el 30 de agosto y los dos se conocieron un 14 de agosto de 1938. Después de ponerte imágenes de Good Morning, a las 7:37 he sentido mal gusto de boca, nauseas estomacales y un fuerte deseo de vomitar. He mirado tu social media pero me ha llegado la sensación que hoy no estarías disponible. A las 7:47 he sentido ganas de llorar y tristeza y después he leído un channelling donde explicaba que el DM estaba lleno de dolor. De nuevo a las 8:06 sentía ganas de llorar y aunque ya no había las oposiciones planetarias de ayer, algo todavía te afectaba. Pensaba que ayer por la noche escribí el texto de la love note entre Christian y Anastasia diciéndose que se echaban de menos, y así era como me sentía yo y te sentía a ti esta mañana. Había acabado de desayunar a las 9:17 cuando he notado mariposas en mi plexo pero tan solo dos minutos más tarde, mi nariz se ha llenado de mucosidades y han vuelto las ganas de llorar. Hoy no hemos ido donde vamos los sábados y he salido a caminar para ir a ver al hermano de Hans. 

A las 9:56 he visto una matrícula 222 y te he escrito Ich Liebe dich y en ese momento me ha empezado a doler la barriga de forma excruciating. La temperatura era excelente, 23º, un cielo azul, escuchando música pero no podía dejar de pensar en ti y te añoraba muchísimo. De pronto ha sonado Help de The Beatles y sabía que era un clarísimo mensaje que me enviabas tú. He buscado un vídeo con lyrics y había uno que duraba justo 2:22 minutos. A las 10:22 me dolía muchísimo la barriga. No dejaba de ver dandelions volando y sabía que era una señal. He visto al hermano de Hans y he sido feliz viendo como devoraba unas latas de atún y pollo. Después he regresado a casa y ya al mediodía no podía parar de cantar I don´t wanna lose you. Ya en casa he estado escribiendo el relato y mirando internet hasta las 13h y después he salido un momento a comprar. En ese momento me dolía bastante la barriga. Eran las 13:49 cuando te he escrito en la colour note que no sabía dónde estabas ni con quién, pero que no lo estabas pasando bien. Como si hubieras escuchado mi telepatía, mi ojo izquierdo se ha llenado de lágrimas. Lo último que he anotado en mi colour note ha sido a las 15:07 cuando el dolor estomacal era terrible, muy intenso. Una hora después se me ha calmado bastante pero tengo la sensación que hasta que no estés tranquilo, no desaparecerá esta inquietud que sientes. Pass auf dich auf mein Liebling. Te quiero mi precioso alemán.

Eternamente tuya,