Aunque estemos tristes, nos queda el amor

 

¡Hola mi dulce amor! Te confieso que hoy no tenía intención de escribirte ni de hacer astral sex. Te notaba lejos, pensaba que estabas en un evento laboral, pero además desde hace casi 24 horas que arrastro una tristeza que se refleja en mis ojos. Ayer In the Evening primero sentí un poco de dolor en el corazón y poco después de ponerte las imágenes de Gute Abend sentí arousal y love sparks , como si de repente conectaras conmigo y estuvieras solo y pensando en mí.

Esta mañana me sentía con el ánimo bajo, físicamente y moralmente. Cuando he ido a comprar el pan, notaba una pesada tristeza, era como una atmósfera que oprimía, y ya no sabía si era yo, eras tú o los dos a la vez. Te notaba lejos de nuevo y no quería molestarte. He ido a la terraza con los gatos y he hablado en voz alta contigo, te he explicado muchas cosas, entre ellas esa luz de esperanza que veo a final de este año, cuando los tres planetas que están ahora en Capricornio (y que a ti te afecta la casa 8 y a mí la 4), Júpiter y Saturno pasarán al signo de Acuario  (tu casa 9 y mi casa 5).  La última vez que eso ocurrió fue entre 1991 y 1993 y mi vida cambió mucho. Empecé a salir con amigas, a discotecas, encontré mi primer trabajo,  mi equipo ganó la primera Champions, viajé y fueron dos años maravillosos.

Faltaban pocos minutos para las 10 y he conectado el ordenador. No acostumbro a hacerlo por las mañanas, pero tenía que hacer unos trámites con Toyota y otros asuntos. No sé si me has visto por la cámara, si has pensado en mí, pero de repente he notado una maravillosa Love Bubble tan intensa, que he ido a mi habitación y he besado apasionadamente tu foto mientras te susurraba Te quiero.  Pero tras aquella felicidad, de nuevo la tristeza me ha atrapado y he llorado en silencio. He buscado consuelo mirando el vídeo donde apareces hablando, y verte y  escucharte me hacía sentir bien. Imaginaba que era yo a quien sonreías y mirabas con complicidad…En ese momento te hubiera comido a besos.

A las 11 he salido de casa y a los pocos segundos me he encontrado una pluma blanca y después no dejaba de ver matrículas 333 y las iniciales de tu nombre y apellido con una Y…¿de yearning? Mientras estaba comprando,  notaba tu presencia silenciosa y un sutil deseo de hacer astral sex. Cuando he llegado a casa era ya mediodía y aunque no sentía la kundalini, notaba un cosquilleo y tu telepatía. He encendido una vela rosa y una varita de incienso de Nag Champa y te he dado besos, y a los dos minutos me ha saltado el corazón y mi plexo se ha llenado de fuego. Nuestros corazones estaban conectados ya…

Cuando nos hemos visto hemos hecho una postura tipo Misionero. Tú me besabas los labios con mucho amor, me tocabas los pechos y me acariciabas, pero yo apenas estaba húmeda y tenía la cara muy triste, como en la foto de ayer. Nos hemos dicho telepáticamente que no hablásemos de nuestras preocupaciones y tú me has mirado serio. Me has dicho Guapa y yo he sonreído tímidamente. Entonces has hecho una variante donde te apoyabas sobre las palmas de las manos y he notado la penetración más profunda y he gemido de placer. Tú has cabalgado más rápido y te has dado cuenta de la expresión de mi cara que era de éxtasis y felicidad y los dos hemos empezado a disfrutar a la vez. Entonces sonriendo te he dicho: Me encanta lamerte los Hoden y no sé por qué. Son como albaricoques. Tú me has sonreído y telepáticamente me has dicho que te gustaba que te lo hiciera.

Entonces te has puesto Standing  y yo de rodillas y te he lamido Pimmel pero después me he centrado en los Hoden y Perineo y tú gemías y disfrutabas muchísimo. A continuación hemos hecho una postura los dos de rodillas pero yo de espaldas a ti y la penetración era muy profunda. Me acariciabas los pechos y el clit y me volvías loca. Mientras me mordías el cuello has gritado: ¡Eres mía! Y yo he gemido rendida a ti. Me penetrabas muy al fondo y yo cada vez estaba más excitada, pero tú querías mirarme a los ojos para ver mi cara de excitación y para comprobar si estaba húmeda. Me he sentado sobre una mesa y has visto que estaba muy mojada y  al penetrarme he gemido fuerte. Sentía tu Pimmel muy duro y caliente pero era tu mirada lo que de verdad me excitaba, porque en tus ojos mostrabas deseo y amor. Yo me he lamido los labios y después te he acariciado las nalgas y los Hoden y te has excitado mucho más. Ambos hemos gemido muy fuerte porque el placer era maravilloso, y al final un orgasmo intenso y profundo mientras veía un cielo lleno de estrellas brillantes. Ha sido muy mágico amor mío. Tres horas más tarde, cuando estaba lavando los platos, he conectado la radio y ha empezado a sonar Faded y sé que era una señal de que los dos estamos tristes. En parte es algo positivo, porque si nos echamos de menos es porque sentimos amor y notamos que nos falta algo. Te quiero mi precioso alemán de ojos color café.

Eternamente tuya,