Mi amado tesoro, te quiero y te adoro

 

¡Hola mi dulce amor! Eres el arco iris en un día de lluvia, mi estrella brillante en un cielo oscuro, el terrón de azúcar de mi café, mi placer y mi burbuja de amor…Ayer después de poner el relato en el blog, me empezó a doler el corazón y te echaba mucho de menos. Después los dos desconectamos y poco imaginaba que me regalarías un momento mágico antes de ir a dormir. Estaba tumbada en la cama con Nina y Hans a mi lado, riendo a carcajadas con la película Annie Hall de Woody Allen, cuando de repente me llegó una maravillosa little love bubble y me levanté para darte besos apasionados. Cuando cogí el móvil, eran las 22:22 y me pareció como si me dijeras TE AMO. Yo te escribí que me moría de amor y que te había besado con pasión.

Esta madrugada me he despertado a las 4 a.m. y estaba lloviendo con fuerza. Me he dado cuenta que notaba sensaciones maravillosas en el pecho y corazón y no sé por qué, tenía la sensación que estabas despierto. Te he dado un beso suave y juraría que lo has notado, porque he sentido mariposas en el plexo. Al regresar a la cama, no podía dormir y he abrazado mi almohada como si fueras tú. He visualizado que los dos estábamos estrechamente abrazados, piel con piel, cuerpos apretados y rebosantes de amor. Entonces he visualizado que nos envolvía una burbuja de color rosa y te he dicho telepáticamente: Nadie ni nada te va a hacer daño, amor mío. Y como si tú estuvieras consciente, hemos notado una Bliss, una sensación de amor en los chakras corazón y plexo que nos han relajado de felicidad.

Eran las 8:30 y estaba comprando el pan y he notado maravillosas sparks of love y he recordado la frase que había puesto de que recuerda que eres un sol y no una vela. Y camino a casa te decía telepáticamente mientras llovía: You are my Sunshine, Du Bist mein Sonnenschein…

Te he dado besos y me he sentido muy sensible, con mariposas en mi plexo y muchas ganas de amarte, a pesar que no sentía nada de arousal. Me sentía romántica y me ha parecido mágico cuando veía llover y encendía una vela rosa y una varita de incienso de orquídea. No hace falta tener la kundalini, basta mi deseo, mi amor y nuestros chakras sacra y corazón conectan.

Cuando nos hemos visto, tú estabas sentado en una butaca y yo encima de ti, de cara. Nos hemos abrazado y besado pero parecías un poco triste y apagado. Pero no dejabas de tocarme y besarme los pechos. El placer era un poco flojo y aunque no hablábamos, nos mirábamos con mucho amor. Me he movido en círculos pero nos faltaba energía. Tenía que excitarte más y entonces te he hecho sexo oral. Continuabas sentado y te he hecho una deep throat y has empezado a gemir, pero cuando has enloquecido ha sido cuando te he penetrado analmente, primero con un dedo y después con dos. Seguía lamiendo tu Pimmel y  Hoden mientras mis dedos se hundían entre tus nalgas. Has gemido muy fuerte y me has mirado con ojos de éxtasis. Estabas disfrutando muchísimo y te has excitado bastante. Yo sonreía y entonces he movido mis dedos de forma circular y esto todavía te ha enloquecido más, gritando y gimiendo fuerte.

Tú también me has hecho sexo oral, tú todavía sentado y yo de pie delante de ti. Me has lamido rápido y era tan fuerte el placer que te he dicho Stop porque estaba muy excitada y deseaba que me penetraras. Hemos escogido la postura Bulldog, yo estaba muy húmeda y tú muy animado. Cuando realizamos esta posición, el placer es siempre increíble. Nos excita mucho a los dos y aparte de una penetración profunda, sentimos un placer extra fuerte. Tú has gemido con los ojos cerrados y yo no dejaba de repetir tu nombre y gemir hasta que he gritado: ¡Eres increíble! ¡Me vuelves loca de amor y placer! Has cabalgado más rápido y ambos disfrutábamos mucho. He notado como se me activaba el chakra corazón porque estábamos sintiendo amor también. La penetración era muy profunda y el placer delicioso e intenso como si tuviéramos la kundalini y la verdad es que nos hemos animado y excitado mucho. Al final un orgasmo muy intenso casi cósmico, donde yo gritaba tu nombre mientras tú seguías embistiendo con mucha fuerza.

He ido a la cafetería más tarde y de nuevo no dejaba de ver matrículas 33 y 333. Alrededor de mediodía, he notado un débil estallido en mi corazón y después un poco de dolor. Cuando estaba ya en mi casa, el dolor en el pecho era más fuerte y te he dado besos dulces. A pocos minutos para las 15 h me quemaba el plexo y sentía amor dentro de mí. Después, me he puesto a lavar los platos y nada más conectar la radio, ha  sonado Chandelier, que me ha transportado a aquellos maravillosos días de noviembre del 2014. De pronto he sentido mucha nostalgia y tristeza, y como si tú lo hubieras captado, me ha empezado a doler el corazón. A continuación ha sonado John Legend con All of me loves all of you y mis ojos se han llenado de lágrimas. No sé por qué estoy tan sensible, quizás porque te echo mucho de menos. Te quiero mein Liebling.

Eternamente tuya,