¡Hola
mi dulce amor! A pesar de que podemos estar en silencio, lejos en la distancia,
ignorarnos y tratar de distraernos, hay un magnet que nos atrae al menos en la
5D. Esta mañana cuando me he levantado a las 7:30 de nuevo me sentía sin
energía y apática y pensaba en ti pero me faltaba más cariño y ternura. Te he
dado el beso de Guten Morgen y te he puesto imágenes y una hora más tarde,
cuando estaba en la calle, he notado tu presencia, he sentido maravillosas love
sparks. Pero te notaba lejos, distante…Me sentía como si estuviera dentro de
una jaula y necesitaba ir a ver a los gatos, pasear entre la naturaleza,
tomarme un té, pero no puedo hacerlo.
He
ido con los gatos a la terraza y he empezado a llorar sin poder evitarlo. He
recordado una conversación con la dependienta de la panadería que había tenido
a las 08:30. Esa chica sabe que me gusta la numerología y me ha preguntado qué
tal le iría este año 2020. Su número de nacimiento es 2 (la suma de su fecha entera) y como este
año es un 4, el resultado es un 6. Le he dicho que el 6 y el 3 son los mejores
años (en el 2015 tú tenías el 6 y yo el 3) y que este año era bueno para el
amor, para viajar, que era un año muy positivo. Entonces ella sonriendo me ha dicho: “Lo has clavado” (Spot on!). Y
me ha comentado que precisamente ahora que la gente lo está pasando fatal y el
mundo está confinado (lockdown) ella se ha enamorado locamente. Y he llorado en
la terraza al recordar como Felix le decía a Hans mientras lo abrazaba
fuertemente: El mundo está en guerra, se cae a pedazos, no sabemos si al día
siguiente estaremos vivos, y a nosotros se nos ocurre enamorarnos. En mi vida
había sido tan feliz. Mientras me secaba las lágrimas, me ha empezado a
doler el corazón y te he dicho en voz alta: Sé que tú también me notas lejos y no te doy muchos besos. Es una dura
prueba. Pero no sé qué me pasa…
Creo
que te han llegado mis palabras, porque poco después he empezado a sentir una
ligera excitación y cuando he ido a mi habitación, te he dado besos apasionados
mientras te decía: I can´t stop thinking
about you. Te deseo. Y a los pocos segundos la excitación ha aumentado
muchísimo a la vez que el corazón me palpitaba muy rápido. Pero es que sólo 5
minutos más tarde el sacra me ardía, hacía mucho tiempo que no sentía aquel
fuego entre mis piernas. Y sentía tingling en los pies. Mientras encendía una
vela de vainilla y una varita de incienso de orquídea te he preguntado: ¿Quieres hacer el amor?. Te he besado
pero ya sabía la respuesta.
Cuando
te he visto, tú estabas impaciente por tocarme. Hemos hecho la misionero facing
y tú me penetrabas muy rápido y me tocabas mucho, como si hubiera pasado un año
sin hacer astral sex. Tus ojos estaban brillantes pero un poco tristes. Cuando
te he acariciado, creía que te iba a doler el plexo, la barriga pero me ha
sorprendido comprobar que te hacía daño el corazón. Era un dolor intenso que he
sentido dentro de mí pero de repente ha desaparecido, como si mi amor fuera el
mejor bálsamo para tu dolor. Nos besábamos y acariciábamos con mucho amor y yo
no dejaba de gemir tu nombre, y entonces tú me has dicho: Contigo lo tengo todo, placer, amor…He sonreído y nos hemos
abrazado con fuerza. Después te he hecho sexo oral y te he pedido que te
pusieras de pie para poder pellizcarte suavemente las nalgas. Tú veías como yo
lo hacía con deleite y gusto y te excitabas todavía más y a mi me motivaba que
me miraras a los ojos. Posteriormente me has sentado en una mesa y me has
penetrado. Querías mirarme a los ojos, besarme los pechos y sobretodo ver mis
muecas de placer. La penetración era muy profunda y tú embestías con fuerza y
ganas y notaba como si el sacra estuviera muy abierto. El placer era muy
intenso y ambos no dejábamos de gemir. Era tan fuerte el placer, que veía como
temblaban tus piernas y yo sentía una electricidad que me subía de los tobillos
a las rodillas. Después he levantado las piernas y las he puesto sobre tus
hombros y nuestros cuerpos han quedado más apretados. Podía acariciar tus
nalgas y también tus Hoden y tú te volvías loco de placer. Te has movido en
círculos y notaba tu Pimmel recorriendo toda mi vagina. Te miraba a los ojos y
podía ver en ellos el placer que estabas sintiendo, la misma intensidad que
sentía yo. Gemía tu nombre y te veía muy feliz a pesar de la sutil tristeza en
tus ojos. Al final un mega cósmico orgasmo maravilloso donde he podido gritar
tu nombre.
Más
tarde, no podía dejar de darte besos. Al mediodía estaba en la terraza y he
visto una furgoneta de reparto con una frase que decía: Lo mejor está todavía
por llegar. Y he pensado que estoy segura que cuando menos lo esperemos, nos
espera una felicidad que ni imaginamos. Cuando estaba a punto de comer, he
notado en mi corazón una mezcla de dolor y amor y excitación en el sacra y poco
después tenía los tres chakras activados. Mientras tomaba el Afternoon Coffee
he notado un estallido en mi corazón y al poco me ha empezado a llorar el ojo
izquierdo y no podía detener las lágrimas. Y el pecho me ardía de puro fuego.
Esos
20 minutos donde nos amamos astralmente, me olvido de todo, poder verte,
tocarte, sentirte y escucharte me hace muy feliz, aunque sea de una forma
astral. Y creo que a ti te ocurre lo mismo, desconectas de los problemas y
preocupaciones mientras sientes la kundalini en tu cuerpo. Hoy hace justo 6
años hubo un eclipse de luna en Libra que decían que era apocalíptico porque
era una luna roja y mi signo era de los más perjudicados. Los primeros meses
del 2014 fueron para olvidar, pero quien me iba a decir que los dos últimos
meses serían tan mágicos y cambiarían mi vida para siempre. Cada vez que tengo
una mala época, me acuerdo que cuando menos lo espera, la vida te trae momentos
maravillosos. ¡Te quiero mi precioso Schnucki!
Eternamente
tuya,
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