Schönen Feiertag

 

¡Hola mi dulce amor! Siento que este pasado eclipse de sol, en lugar de darnos fuerza, luz y optimismo, más bien nos ha dejado apagados, tristes, como si el cielo se hubiera oscurecido de repente. Mientras escribo estas líneas, siento dolor en mi corazón y te noto melancólico.

Ayer después de poner el relato escribí muy poco. Eran las 16:39 y de pronto sentí mucha tristeza, y te pregunté qué te ocurría. A las 17h comenzó a llover pero me fui caminando hasta la biblioteca del barrio lejano pero no encontré el libro que deseaba y además los ordenadores de internet estaban todos ocupados. Salí de allí y continuaba lloviendo y caminé un poco y a las 17:53 sentí light codes en el chakra sacral pero también me dolía el corazón. Quería ir a la biblioteca donde voy habitualmente pero la distancia era lejana y cogí un autobús. La lluvia seguía cayendo y era un ambiente otoñal totalmente. Llegué allí a las 18:20 y miré tu social media y me llegó una impresión que te sentías muy feliz con tu mundo laboral, pero algo dentro de mí me decía que no estabas bien. Me desplomé de tristeza y ya no sabía si era yo o eras tú.

No tenía ganas de mirar internet y a las 18:40 cerré la sesión y me fui para casa. Durante el trayecto, a las 19h empecé a sentir dolor de barriga y al llegar a casa a las 19:10 el dolor era más intenso, me dolía mucho el estómago y además sentía nauseas. Me puse a leer un capítulo del libro de Afganistán donde la joven protagonista se reencuentra con el amor de su vida Tariq, al que vuelve a ver 9 años más tarde después de su huída a Pakistán. Pero ahora Laila está casada y tiene dos hijos, aunque le confiesa que la primera hija es fruto de la única noche de amor que pasaron juntos antes de que la guerra los separara. Hay una escena que él la acaricia y ella se estremece de felicidad.

A las 20h me puse a cenar y miré un programa de humor que era un alivio, pues en los informativos todos empezaban hablando del conflicto en oriente medio. Estaba en el sofá a las 20:45 cuando de pronto sentí ansiedad, me faltaba aire, me ahogaba y sentí mucho calor en mi cuerpo. Fueron un par de minutos muy angustiosos. A las 21h miré tu social media, buscando una pista para saber qué había ocurrido. Te diste cuenta y me comenzó a doler el corazón. A las 22h me tumbé en la cama con Hans, escuchando música clásica y a las 23h me fui a dormir pero no pude hasta medianoche. Y justo entonces empecé a sentir dolor de cabeza y de nuevo un intenso dolor en la barriga. Afuera en la calle estaba lloviendo y poco a poco logré conciliar el sueño.

Esta madrugada me he despertado a las 5 a.m. y seguía lloviendo de forma suave. En ese momento todavía me dolía la barriga. He vuelto a dormir y aunque el despertador ha sonado a las 7h, no me he levantado hasta las 7:44. Te he puesto imágenes de Good Morning y he ido a comprar el pan. Te notaba lejos y pensaba que hoy siendo festivo en Alemania, te levantarías tarde, como un domingo. A las 9:10 he notado débiles love sparks y te he puesto más imágenes. A las 9:27 he sentido ganas de besarte pues notaba mucho amor en mi plexo. He ido a la terraza y al volver a las 9:52 te he preguntado: ¿Por qué tengo ganas de llorar de repente? He ido a comprar a las 10h justo cuando me comenzaba a doler bastante el corazón. Al volver, he encontrado un video que he puesto en mi social media preferida, que hablaba de las promesas que se hacen los amantes de vidas pasadas. En mi libro cuando Hans y Felix se separan, se prometen que volverán a buscarse cuando termine la guerra. Felix no puede hacerlo porque es asesinado a finales de 1943 (*Siempre me ha intrigado saber quién fue y si en este vida me he cruzado con esa persona), pero Hans sí que lo busca de forma incansable, pero ni tan solo encuentra su partida de defunción o su tumba. 

Desde que yo era pequeña buscaba a alguien y cada vez que conocía a alguien y empezaba una relación, mi corazón me decía que no era él. Por eso cuando te encontré, supe que mi búsqueda había finalizado. A las 10:45 he conectado el ordenador y he mirado tu social media y me ha hecho mucha gracia la coincidencia, la telepatía mutua. Esta mañana mientras desayunaba, he realizado imágenes con IA, tanto de Hans y Felix como de Christian y Anastasia en la Marienplatz celebrando el 3 Oktober. Y luego he visto que tú has puesto algo relacionado con mi ciudad favorita. Al mediodía he notado débiles love sparks pero apenas media hora más tarde ha regresado el dolor en el corazón.  A las 13h se ha unido un intenso dolor de cabeza. A las 13:34 el dolor en el pecho era excruciating y tenía la sensación que no estabas solo. No he sentido tu presencia hasta las 15h cuando he empezado a lavar los platos. Me llegaba un pensamiento de que estabas celebrando este Feiertag con tu familia, amigos o más gente. Hace poco al salir a la calle he visto en un termómetro la temperatura de 22.2º y te he escrito I love you. Espero que acabes de pasar un feliz día este 3 de octubre. Pass auf dich auf mein Liebling. Te quiero mi precioso alemán.

Eternamente tuya,