Contra viento y marea

 

¡Hola mi dulce amor! Me he dado cuenta que a medida que han transcurrido los años, todo se ha complicado más, hay más barreras y dificultades, pero sin embargo somos más fuertes y el amor entre nosotros resiste contra viento y marea.

Ayer te puse el relato y sabía que estabas expectante por lo que iba a escribir. A las 16:44 noté mucho fuego en mi plexo. Salí de casa con destino a la biblioteca del otro barrio. Fui al cementerio a visitar a mi padre, necesitaba hablar a solar con él y me he dado cuenta que él me envía mensajes a través de sueños llenos de ánimo y fuerza, y eso jamás ocurrió cuando estaba vivo. Estuve en la biblioteca mirando internet desde las 17:15 hasta las 18h y miré tu social media y  todavía me dolía un poco el corazón. Cogí un libro de Khaled Hosseini llamado “Y las montañas hablaron”. El de Paulo Coelho me resultaba muy lento y deprimente. He leído casi todos los libros del escritor brasileño, algunos me encantaron como Once minutos, Adulterio o El alquimista que leí durante mi viaje a München en julio del 2015, pero otros no me gustaron y este que te comento es uno de ellos. Allí cerca hay una panadería que venden Bretzels y me compré uno y me sentí muy feliz.

Eran las 18:19 cuando me senté en un banco cerca del hospital y escribí en mi colour note que sentía ganas de llorar pero de forma reprimida, pero a la misma vez sentía una mezcla agridulce con dolor en el corazón y débiles love sparks en el plexo. De regreso a casa me vino de repente la escena de la serie “A man in an orange shirt” donde Michael se tiene que casar con Flora y su amante secreto Thomas acude como padrino de boda, con su bonita sonrisa que desaparece cuando los dos se quedan a solas en el baño y se besan con pasión. A las 18:48 me estaba comiendo el bretzel y me empezó a doler el corazón. Me puse a leer el libro mientras sonaba una deliciosa melodía de Felix Mendelsohn y mis gatos dormían sobre mis pies. De pronto empecé a sentir dolor de barriga y al mirar la hora eran las 19:04 y no pude evitar escribirte: Has llegado a casa ¿verdad?. Me concentré de nuevo en la lectura, me fascinó lo bien que escribe este autor afgano, me sumergí en un mundo lleno de pobreza y dolor pero el autor te describe detalles preciosos que te hacen suspirar. Terminé el primer capítulo y a las 19:37 escribí que todavía me dolía la barriga y que tu corazón sabía la verdad.

Antes de las 20h te puse imágenes de Good Evening y el corazón a los pocos minutos de nuevo empezó a dolerme.  A las 20:26 noté mucosidades  en la nariz y a las 20:40 después de saludar a mi padre, te dije a ti que sentía muchas ganas de llorar. Hubo un instante a las 21:23 que me llenó de desesperación. Sentí un excruciating y terrible dolor en mi barriga y como estaba sola en la cocina solté un insulto, un improperio mientras notaba retortijones en mi estómago. El dolor duró todavía media hora más pero fue disminuyendo su intensidad. A las 22:34 te escribí Gute Nacht mein Liebling y me vibraba el corazón. Intenté dormir pero no lo conseguí hasta medianoche. Mi mente no dejaba de repetir mentalmente lo que había leído durante el día, visualizaba a gente de tu alrededor sonriendo pero tú no estabas muy contento. Empecé a jugar a la numerología, analizando nombres, empresas, años personales etc y así poco a poco me dormí.

Hoy me he despertado a las 6:20 y notaba jugos gástricos en mi garganta. Te he puesto imágenes de Good Morning y te he deseado un feliz miércoles. Antes de salir de casa a las 7h, he leído que la luna llena de mañana será muy intensa, la más problemática de todo el año. Tú y yo tenemos la luna en aries. He ido a ver los hermanos de Hans que han venido acompañados de dos amigos más, y les he dado un snack líquido de una marca alemana llamada Vitakraft. Es una especie de mayonesa que encanta a todos los gatos, los míos y los callejeros. La temperatura era muy elevada, 20º y no es normal. Llevo una chaqueta fina pero todavía me visto con jerseys de manga corta. Ya estaba en casa a las 8:08 cuando me ha empezado a doler un poco la cabeza y la barriga y me llegaba un pensamiento de que estabas embarrased, algo avergonzado. He salido a comprar el pan y cuando regresaba a las 8:38 he escrito en mi colour note: ¡Qué dolor de barriga tan fuerte y ganas de vomitar! 

Afortunadamente ha sido algo efímero. A las 9:15 he notado débiles love sparks mezcladas con un ligero malestar estomacal. Te he puesto más imágenes para explicarte cómo me sentía, y de repente a las 9:22 he sentido muchas ganas de llorar pero de forma reprimida. Te he comentado que siento amor entre nosotros todavía, a pesar de todo. A las 9:43 he sentido mucha tristeza dentro de mí pero no era yo. A las 9:47 estaba en la terraza con los gatos y he notado maravillosas mariposas en el plexo. Después he ido a comprar y a las 11h he conectado el ordenador. Te notaba lejos, ocupado pero de pronto a las 11:25 he sentido ganas de llorar. A las 12:12 he notado mal sabor de boca y un poco de malestar estomacal pero ha sido breve y anecdótico. A las 13:21 he notado mucho amor dentro de mí apenas unos minutos después de ponerte una imagen. Y ya no he notado más tu presencia. Espero estés bien. Pass auf dich auf mein Liebling. Te quiero mi precioso alemán.

Eternamente tuya,