Ni tiempo ni distancia

 

¡Hola mi dulce amor! Como hoy tengo poco que explicarte, al final de la página te he añadido lo que escribí en mi diario un día como hoy de hace 9 años. Había pasado una semana muy triste y complicada y volver a verte fue como ver el sol radiante.

 

Ayer poco antes de comer, la dueña de Rufo me dijo que se quedaría con él hasta el sábado al mediodía, por lo que podía disponer de la tarde libre del viernes. Te puse el relato en el blog y Hans mi gato estaba a mi lado. A las 16:16 sentí una sutil tristeza y diez minutos después comenzó a dolerme muchísimo el corazón. Imaginé que estabas pendiente de si te había escrito o no. A las 17h salí a caminar y a las 17:22 era excruciating el dolor en el pecho pero en el lado derecho. En tan solo 5 minutos vi dos matrículas 222 y te escribí Ich Liebe dich. Fui al rincón de las palomas y había sombra y una decena de “doves” que me esperaban impacientes. Después volví a caminar y me di cuenta que echaba mucho de menos al perro, me aburría sin nada que comentar o decirle cosas bonitas.

 

A las 17:47 vi una matrícula 222 y justo delante otra con las iniciales de tu nombre y apellido y una L quizás de Liebe o Love. Llegué a mi casa a las 18:30 y todavía me dolía el corazón y tenía ganas de llorar pero de forma reprimida. A las 19:14 me dolía un poco la barriga y sabía que no estabas solo. Te puse imágenes antes de las 20h y justo a esa hora sentí débiles love sparks y me di cuenta que estabas pendiente. Me llegó una telepatía donde me decías que te gustan mucho las imágenes AI. Mientras cenaba me volvió a doler un poco el corazón y de repente a las 21h sentí un fuerte bajón de energía y me dolía la barriga. No me tumbé en la cama, me recuperé rápido pero me sorprendió lo ocurrido. Me fui a dormir a las 22:22 después de ponerte Gute Nacht mein Liebling.

 

Esta madrugada me he despertado a las 4 pero enseguida he recuperado el sueño. Sin embargo a esa hora notaba jugos gástricos y malestar estomacal. Me he levantado a las 7:07 y todavía notaba un ligero dolor en la barriga. Mientras me duchaba he tenido una especie de visión y he visualizado algo debajo del colchón donde duermes. Espero sea mi imaginación, pero si me llegan estas imágenes de forma súbita, es porque hay algún mensaje o confirmación. Después te he puesto imágenes y a las 7:36 me ha empezado a doler el corazón pero también a vibrar. Sentía que ya estabas despierto, pues mi ojo derecho se ha llenado de lágrimas. He ido a comprar el pan y te notaba sensible, un poco triste. Mientras desayunaba mi tortilla de especias te he puesto más imágenes y a las 9:14 he notado débiles love sparks en el plexo pero también mucosidades en la nariz y ganas de llorar. Entonces me he acordado de mi diario del año 2015 pues no podía dejar de pensar en aquel lunes 17 de agosto donde volví a verte.

 

A las 10:20 sentía una mezcla agridulce de dolor en el corazón y love sparks en el plexo. A las 11h el dolor en el pecho era excruciating. Pero a las 11:30 han vuelto las mariposas maravillosas. Al mediodía sentía como si no estuvieras solo, pues han regresado los jugos gástricos a mi barriga pero ha sido efímero. Mientras tomaba el Afternoon Coffee he notado débiles love sparks. Lo último que he anotado en la colour note ha sido hace poco, a las 15:41 cuando he ido a ver los gatos callejeros. De repente he sentido muchas ganas de llorar y no comprendía la causa. Ahora he vuelto a leer el extracto de mi diario de hace 9 años y creo que te va a poner un poco triste y a la vez nostálgico. De aquí un rato me voy a ver a Rufo. Lo necesito más que nunca, me sirve de terapia. Pass auf dich auf mein Liebling. Te quiero mi precioso alemán.

 

Eternamente tuya,

17 DE AGOSTO DEL 2015: He vuelto al trabajo después de una semana de vacaciones pero han sido unos días para olvidar, tristes y dolorosos. Ayer domingo me enteré que Perla, la perra de los vecinos fue entregada a unos amigos de María y no pude despedirme de ella. El sábado falleció mi adorada tía Roser, una mujer que siempre tenía una sonrisa en la cara a pesar de todas las desgracias que han pasado en su vida. Y no sé si hoy veré a mein Liebling en el restaurante. A mi tía ya no la veré más, pero creo que al amor de mi vida y a Perla ya será casi imposible.

Mein Liebling, gracias por venir, por saludarme, por hacerme tan feliz. ¿Cómo quieres que te olvide? Mi corazón se vuelve loco cuando te ve, el estómago se cierra y no puedo esconder mi felicidad. Mis ojos vuelven a estar brillantes después de tantos días de lágrimas y dolor. Cuando me dirigía al restaurante, me resignaba pensando que él no vendría pero mi barriga se ha llenado de mariposas y mi corazón palpitaba de forma rápida. Es como si mi intuición sintiera su presencia. Al llegar al restaurante y verlo, no sé cómo definir la sensación de felicidad. He sentido una taquicardia, especialmente cuando nos hemos mirado a los ojos y él me ha saludado amistosamente. Llevaba una camisa negra y me ha hecho pensar en su estado de ánimo. Estaba guapísimo y por un momento he recordado la foto en blanco y negro que ha puesto en Linkedin sin gafas y no parecía el mismo. Dios, me volvía loca su presencia. El me ha mirado un par de veces pero estaba muy serio. Yo era incapaz de comer y me he fijado que ha habido un instante que me he puesto bien el tirante del sujetador y él me ha mirado fijamente. 

De pronto a las 14h ha sonado “A sky full of stars” y siempre será nuestra canción. He visto que él se ha pedido un cucurucho de nata de postre y ver su lengua me ha excitado. Sus labios son como cerezas, su lengua parece tan provocadora que me mojo toda. El estaba luminoso, a pesar de la camisa negra que lo ofuscaba un poco. No sé que tiene de especial pero es algo que no he sentido nada igual con nadie, ningún hombre me ha hecho sentir lo que ha conseguido él. He visto que se acercaban unos compañeros y lo palmeaban en la espalda, como si se despidieran de él o le desearan suerte en su nuevo trabajo. De pronto me ha atrapado una fuerte tristeza. Necesitaba llorar, todo se ha juntado de repente, el recuerdo de mi tía, de Perla y saber que el amor de mi vida se va y quizás no lo vuelva a ver. El se ha levantado con unos compañeros y ha hablado con su jefe y su amigo de rizos le ha dicho: Me voy con los operarios. Y se ha marchado y me he quedado con una sensación de emoción y sensibilidad. Ya he sido incapaz de comer.