Recuerdos nostálgicos

 

¡Hola mi dulce amor! Hoy te he puesto una frase en mi social media preferida que define perfectamente cómo me siento ahora: Cuando puedas contar tu historia sin derramar lágrimas, sabrás que por dentro te curaste. Hace un par de días estuve leyendo mis colour notes de finales de mayo del 2022 y no sentía ningún tipo de emoción, pensé que ya no me afectaba. Sin embargo ayer viví un tremendo dejà vu que me despertó sensaciones que me han demostrado que te quiero mucho y que a pesar de las alegrías, el placer y las love bubbles, también duele el amor. 

Ayer te puse el relato y poco después me silbó muchísimo el oído derecho, casi dos minutos y eso me sorprendió. A pesar que no me apetecía, salí a caminar un poco y sentía un fuerte bajón de energía. A las 17:53 vi una matrícula 222 y te escribí Te quiero mein Liebling. En lugar de volver a casa, decidí al psiquiátrico masculino donde hay preciosos jardines y una imponente iglesia del siglo XIX. Me senté en las escalinatas, en un rincón lleno de paz y silencio y me puse a mirar el móvil. De repente mi mente me hizo visualizar unas imágenes del 01/06/2015 cuando era también un lunes de pascua granada y era festivo. Las imágenes se proyectaron como si estuviera viendo una película y pude sentir en carne viva lo que experimenté hace 9 años. Recuerdo que hacía dos semanas que no te veía, la última vez que fuiste al restaurante fue el 18 de mayo. Pregunté a las camareras y una me dijo que habías vuelto a Alemania y otra me dijo que quizás estabas en Zaragoza, en una sede de tu empresa. Me acuerdo que le envié un mensaje a Sandra, la camarera de la ZAL y le conté que no podía dejar de llorar, que no entendía por qué me afectaba tanto tu ausencia.

Por esa fecha estaba leyendo el libro de Paulo Coelho llamado “Adulterio” y parecía que me lo hubiera escrito expresamente para mí. Era una especie de consuelo pero el dolor era inmenso, no comprendía por qué estaba sintiendo tanta angustia y desesperación. Nunca me había ocurrido nada semejante con otro hombre.  Justamente en un jardín del psiquiátrico terminé las últimas hojas del libro y ya nunca más lo he vuelto a leer. Esa misma semana el Barça jugaba la final de la Champions en Berlín, ciudad que me hacía recordar a ti y no disfruté el título, no lo celebré apenas ese 6 de junio. Todavía tardaría unos días en volverte a ver, concretamente un lunes 15 de junio, cuando te vi con tu angelical camisa blanca hablando en inglés con tus compañeros. La mirada que me mostraste nunca la olvidaré, tus ojos hablaban solos. Por suerte pude disfrutar de ti dos meses más antes que partieras a tu país.

Eran las 18:27 y estaba a punto de salir del psiquiátrico, cuando de pronto sentí ganas de llorar y mucha tristeza y mi cabeza mentalmente cantaba “Miss a thing”. Hacía 3 minutos que había mirado tu social media. A las 18:48 noté light codes en los chakras heart & sacral. A las 19:22 me distraje mirando videos y de repente comencé a pensar en ti, preguntándome qué estarías haciendo y captaste mi telepatía pues me llegó una bola de fuego que me quemó todo el cuerpo y noté gusto de alcohol en mi boca y pensé que estarías tomando una cerveza con tus amigos. Minutos después mis ojos se llenaron de lágrimas. Antes de las 20h te puse imágenes de Good Evening pero me di cuenta que estabas muy callado y silencioso y sabía que no estabas solo. A las 21h me empezó a doler un poco la barriga y más tarde a las 21:43 el dolor en el corazón era muy intenso. Te dije que los dos últimos días a esa hora habíamos acabado de hacer astral sex. Me fui a dormir a las 22:36 y te escribí Gute Nacht mein Liebling. Todavía me dolía un poco la barriga.

Me he despertado esta madrugada a las 4 a.m. y todavía me dolía el estómago. Me he levantado a las 6:20 y notaba la garganta irritada. Me sentía triste y desmotivada pero te he puesto imágenes de Good Morning. A las 6:37 he estornudado dos veces. He ido a ver los hermanos de Hans y el amigo blanco y negro que me han llenado de felicidad. Necesitaba verlos mucho. De regreso a casa he visto dos matrículas 222 en apenas un minuto a las 7:45 y te he dicho I love you. Justo a las 8h he notado como si quisieras llorar pero no pudieras. De pronto a las 8:05 he notado un débil estallido en mi corazón y te he visualizado mirando tu móvil y parecías triste. Antes de las 9h te he puesto más imágenes y tú estabas pendiente, pues un minuto después he estornudado dos veces. He desayunado, he ido a la terraza con los gatos pero no ha sido hasta las 10:12 cuando estaba en el supermercado que me ha empezado a doler el corazón. A las 10:54 he vuelto a estornudar dos veces tras ponerte más imágenes. 

Al mediodía te he puesto más imágenes y ha empezado a dolerme muchísimo el corazón. Intentaba distraerme pero hoy está siendo un día complicado. A las 13:45 he estado escuchando 10 minutos de música tocada por un arpa y de repente me ha empezado a llorar el ojo izquierdo. Me he emocionado pero también captaba tu tristeza. Mientras tomaba el Afternoon Coffee he mirado tu social media y te he puesto más imágenes aunque hoy no tengo muchas ganas de nada. Antes de ponerte el relato en el blog, he sentido nostalgia y he mirado las empresas que están actualmente en la ZAL y ni la tuya ni la mía figuran ya en el listado. Nosotros nos marchamos en abril del 2016 y en la que estuviste tú no sé cuándo se fue. Fue una época inolvidable que siempre llevaré en mi corazón. Siento tristeza y no sé por qué, pero la verdad es que te echo mucho de menos. Esto que estamos viviendo no es nada parecido a lo que hemos experimentado antes con otras parejas, ¿verdad? Pass auf dich auf mein Liebling. Te quiero mi precioso alemán.

Eternamente tuya,