Una segunda oportunidad

¡Hola mi dulce amor! Hoy he soñado dos veces contigo y algunas imágenes me han entristecido y también me han dejado mal gusto de boca pero enseguida me he acordado de una película que nos puso mi profesor de flores de Bach sobre un chico que ingresaba en un monasterio budista para redimirse y expiarse y los monjes le decían: Todos merecemos una segunda oportunidad.

Ayer después de poner el relato en el blog fui a coger el autobús. Tuve la suerte de que tanto el bus como el tranvía, llegaron enseguida y a las 16h ya estaba en casa de Rufo. El perro estaba solo y tenía muchas ganas de sacarlo a pasear. Cuando eran las 16:29 noté débiles mariposas en el plexo. Minutos más tarde alrededor del Deutsche Schule vi dos matrículas alemanas, MOS y MTK. A las 17:32 descubrí un parque después de cambiar la ruta y era maravilloso, lleno de flores, plantas, silencio, unos bancos de manera rústicos preciosos. Me senté y miré tu social media. A las 17:50 estaba ya en casa de Rufo pero me quedé con él diez minutos más. Me senté en el suelo, el perro puso su cabeza encima mis rodillas y mientras lo acariciaba y le hacía un masaje, en mi móvil sonaba Sull´aria de Mozart. No puedo describirte los ojos de Rufo, la manera tan llena de amor cómo me miraba. El era feliz y yo todavía más. Mientras estaba en el tranvía de regreso a casa, me comenzó a doler el corazón y ya en el bus a las 18:44 escuché Missing you de Puff Daddy. Hacía mucho que no la escuchaba. Ya en casa miré un poco la tele y empecé a mirar una película y una chica era chef dijo que había trabajado en un restaurante de San Francisco. A las 20h te puse imágenes de Good Evening y al mirar tu social media entendí que lo cerraras. Estaba muy cansada después de dos horas caminando y a las 20:45 me di una ducha caliente de diez minutos que fue maravillosa, me relajó y a las 21h ya estaba durmiendo plácidamente.

Después de 7 horas de dormir sin pausa, de pronto a las 3:43 me he despertado tras soñar contigo. Yo te detallo lo que he visto, lo que me ha hecho sentir, sin juzgarte pero pensando que hay muchos mensajes que he comprendido de inmediato y otros todavía no. En el sueño veía una revista pero también un video donde aparecías tú y muchos compañeros de tu empresa, inclusos mujeres políticas como Christine Lagarde o Ursula Von der Layen. En una foto aparecías tú pero era como si no tuvieras ganas, sonreías de manera forzada y podía apreciar tristeza en tus ojos. Entonces te veía a ti y el resto de la gente en un museo enorme, lleno de cuadros, estatuas pero también arte contemporáneo que yo no entendía. Había un momento que tú ibas caminando y de repente tiras al suelo con mucha rabia, una lata vacía de refresco o cerveza, no recuerdo bien. Estás muy enfadado y la gente se sorprende por tu actitud pero a ti no te importa. En España hay una expresión que es “dar la lata”, que significa molestar a alguien, o “es una lata”, que significa que algo es muy aburrido. Veía también que no estabas solo, te acompañaba tu pareja pero tú te mostrabas muy tenso y efervescente. Finalmente veo una foto donde estás con un chico que te ha hecho una entrevista y tú sonríes. Llevas una camisa blanca y el chico me recuerda a Bruno Martelli, de la serie Fame, que tenía los cabellos rizados. Aquí te veo más tranquilo y sé que hablais de futbol y todo es más agradable.

Tras el sueño he intentado dormir pero sabía que estabas despierto, pues allí eran las 20 p.m. Para mi sorpresa, me he despertado a las 5:58 a.m. para escribir otro sueño, esta vez más largo y más agridulce. Yo estaba en una clase de terapias con mi profesora Montse, la médium con la que hice cromoterapia. En la misma clase, cerca de mí estabas tú y llevabas el pelo teñido de color amarillo. Querías parecer rubio pero el color era muy intenso, como el amarillo de la trikot del Borussia. También me sorprendía ver que tenías muchos granos en la cara. Entonces la profesora habla sobre una canción de los años 80 y tú te levantas y empiezas a bailar de manera muy exagerada, haciendo comedia como una bailarina gogo o las que hacen flexiones y se contornean en una barra vertical. A mí no me hace nada de gracia pero al resto de la gente sí, excepto una compañera que te dice: Se nota que has fumado. Y entiendo que se refiere a un porro, one joint. Entonces yo digo en voz alta: Yo no voy a fumar jamás. Y veo que tú instigas a la profesora para que yo dé caladas (drags) a un cigarrillo normal, pero yo sigo muy firme y segura y mirándote a la cara te digo: Yo no voy a fumar nunca y menos ahora que mi padre murió de cáncer de pulmón. Tú me miras avergonzado y encogido y añado: Antes me bebería una botella de vino. En otras imágenes veía a unos “amigos maliciosos” tentándote para que fumes un porro. Todos tenéis alrededor de 16 años, tú apareces muy delgado y jovencito, te veo muy vulnerable y débil de mente por algo que ha pasado recientemente en tu familia. Y lo último que recuerdo es que la profesora expone unas piedras tipo cuarzo, turmalina, malaquita, etc y tú levantas la mano y pides una piedra para formar una familia. Un chico que está al lado tuyo te mira con ojos de burla y repite con voz incrédula: Formar una familia…

Cuando he acabado de escribir el sueño eran las 6:20 y he ido a ducharme y después te he puesto imágenes de Good Morning y de Good Night. A las 7:44 me ha dolido un poco el corazón y pensaba que allí donde estás estaba a punto de ser medianoche. He ido a comprar el pan y no podía sacarme los sueños de la cabeza y pensaba que debo amarte mucho, que hay cosas que seguro que no me gustan de ti pero las acepto, algo que jamás me ha pasado con nadie más. Mientras desayunaba he mirado tu social media y después he ido a comprar con mi madre. De pronto a las 10:28 me ha empezado a doler mucho el corazón y no entendía la causa. He mirado tu social media y lo he entendido todo. Una hora más tarde me dolía la barriga y notaba nauseas, además te sentía inquieto. Al mediodía he acompañado a mi madre al médico y de repente me ha empezado a doler de nuevo bastante el corazón y cuando he llegado a casa a las 13h todavía me dolía. Lo último que he anotado en la colour note ha sido hace pocos minutos, a las 15:48, cuando he notado angustia, una especie de ansiedad que me cerraba el estómago y me oprimía el pecho, me faltaba aire. Ha sido breve pero intenso. La imagen que acompaño hoy al relato es casi una sincronía pues el dibujante ha diseñado la ciudad de San Francisco. El chico lleva gafas y la chica también, y si te fijas hay una letra N en los zapatos de ella. Espero estés bien mein Liebling. Pass auf dich auf mein Schatz. Te quiero mi precioso alemán.

Eternamente tuya,