Momentos inolvidables

 

¡Hola mi dulce amor! Esta mañana cuando iba por la calle, pensaba en hace un año, el día tan triste que viví, pero de pronto me he acordado de hace 9 años, pues recordaba que viniste al restaurante. Al final de la página** te he escrito todo lo que anoté ese día, no he censurado nada, tan solo lo he traducido del catalán al español. Seguro que te trae muy buenos recuerdos y te hace sonreír.

Ayer te puse el relato en el blog pero te noté distante. A pesar que no me apetecía mucho salir a pasear, lo hice a las 17:15 paseando por la calle de los eucaliptos donde hacía varios días que no pasaba. Eran las 17:23 cuando vi la primera matrícula 222 y sentía sensaciones en el pecho, como pinchacitos. Te escribí I love you. Tan solo dos minutos después volví a ver otra 222 pero esta vez noté angustia y opresión en el pecho. A las 17:36 no sé por qué estaba recordando el mes de mayo del 2022, con el Covid y otras circunstancias y de pronto vi la matrícula 222 con nuestras iniciales y una K en el medio. Tuve la sensación que pensabas en mí, que estabas más pendiente de lo que imaginaba. A las 17:43 me senté en un banco de la calle de los eucaliptos y de repente sentí ganas de llorar, con mucosidades en mi nariz. Te pregunté qué te ocurría pero algo me decía que no estabas bien. Ya regresaba a casa cuando a las 18:01 vi otra matrícula 222 y a las 18:02 la última matrícula 222. En apenas 40 minutos había visto 5 matrículas con este número tan especial, escribiendo en mi colour note I love you, Ich liebe dich o Aishiteru. 

Llegué a mi casa y me puse a ver la tele y cuando eran las 19:20 me empezó a doler muchísimo el corazón. Antes de ponerte las imágenes de Good Evening, a las 19:50 sentí unas fuertes nauseas estomacales y muchas ganas de vomitar. Era una sensación desagradable y dolorosa. No volví a sentir tu presencia hasta las 20:57 cuando noté tu tímida presencia. A las 21:32 sentí ganas de besarte, pero apenas 15 minutos después regresó el dolor en el corazón. Me lloró el ojo derecho pero lo que más notaba, era una energía extraña, algo que me ponía en guardia, en alerta. Era la misma sensación cuando una persona te tiende la mano y tú crees que te la va a besar o acariciar y lo que hace al final es morderla o golpearla. Algo me decía que me alejara de ti y sentía que me estabas protegiendo de algo de tu alrededor no muy agradable. Me fui a dormir a las 22:15 para no pensar y descansar mi mente.

Hoy cuando me he levantado a las 7:20 había dormido bien, pero todavía percibía esa energía invisible pero amenazadora. Te he puesto imágenes de Good Morning y he leído previsiones astrológicas y comentaba que se producirá una cuadratura entre marte y Saturno alrededor de miércoles y jueves que ocasionará tristezas pero también discusiones. Cuando eran las 7:53 he notado light codes en el chakra corazón. A las 8:26 he ido a comprar el pan y mientras caminaba por la calle ha empezado a dolerme el corazón y me he acordado de que hace un año mi padre estaba en el hospital y no quería comer, ni tomar la medicación y se mostraba muy hostil. Ese día estuve con él por la mañana y luego por la tarde mientras se inauguraba el mundial de Qatar, yo estaba comiendo sola. Hicimos astral sex y fue como un bálsamo por todo el dolor de mi alma. Y entonces me he acordado de lo que vivimos hace 9 años.

Al llegar a casa he leído mi diario y me ha sorprendido momentos que no recordaba, como las veces que nos miramos a los ojos, como si nuestras almas jugaran en silencio. A las 9h te he puesto más imágenes y he notado débiles love sparks pero diez minutos después te he notado extraño y te he preguntado qué te ocurría. Me ha llegado una telepatía donde me has dicho que necesitabas amor, cariño, mimos. Te he puesto una imagen con la telepatía y a las 9:45 estaba en la terraza con los gatos y he sentido un afilado dolor en el corazón, como si rasgaran mi pecho con un cuchillo. Después he salido a comprar y a las 11h todavía me dolía bastante. La mañana ha sido agitada pues he tenido que ir a muchos sitios. Por fin al mediodía he podido ponerme a escribir y te he puesto una imagen diciéndote que no estuvieras triste y 10 minutos después he estornudado dos veces y he sentido maravillosas mariposas en el plexo.

A las 13h he sentido ganas de llorar y más tarde me ha vuelto a doler el corazón. Mientras estaba comiendo era bastante intenso el dolor en el pecho. Te he puesto imágenes de Good Afternoon cuando estaba tomando el café y he  mirado tu social media y lo he comprendido todo. Mi ojo derecho se ha llenado de lágrimas y he notado mucosidades en la nariz. Me he puesto a lavar los platos y ha empezado a sonar Crowded House con la canción Don´t dream is over y sentía que me la enviabas tú. Como si me hubieras escuchado, me ha vuelto a doler el corazón de forma excruciating y seguidamente ha sonado Elton John con Candle in the wind y de repente he sentido muchas ganas de llorar. Me han llegado visiones de gente de tu alrededor que te decía cosas no muy agradables, haciéndote sentir culpable y recriminándote. He podido reprimir el llanto pero me siento muy triste cuando visualizo estas situaciones donde eres juzgado sin compasión. Hace poco venía de ver a los gatos callejeros y he empezado a sentir maravillosas love sparks en el plexo pero no logro apartar una tristeza que está al borde de las lágrimas. Pass auf dich auf mein Liebling. Te quiero mi precioso alemán.

Eternamente tuya,

**Jueves, 20 de noviembre del 2014: Mi estado de ánimo está pletórico. Alrededor de las 13:30 ya siento un cosquilleo intenso. Cuando hemos llegado al restaurante estaba muy lleno y nos hemos sentado igual que el jueves pasado. Lo he buscado con la mirada pero no lo he visto. Me he resignado pensando que habría venido antes o no vendría. Cuando menos lo esperaba,  5 minutos después ha llegado él con un compañero. Llevaba un abrigo azul marino. El suspiro de euforia me ha subido desde los pies a la coronilla. El se ha sacado el abrigo y llevaba una camisa blanca luminosa como un ángel. Se ha sentado en la fila de delante, de cara. He visto que bebía una coca cola y después se ha pedido una ensalada de salmón ahumado. Yo comía raviolis pero no dejaba de mirarlo de reojo. Ha habido un momento que nuestras miradas se han encontrado un instante pero yo he retirado la mirada. Iban pasando los minutos y de segundo me han traído rape con ajo y él no estoy segura pero creo que era una butifarra. Ha mirado un par de veces su móvil de color negro. 

Entonces mientras yo degustaba el delicioso rape, nuestras miradas se han vuelto a encontrar pero esta vez ha sido más largo e intenso. Sus ojos, su mirada ha sido como un rayo de sol colándose en medio de nubes o rocas. Entonces yo he sentido mucho calor. No sé si era el ajo del rape, la temperatura primaveral o el repentino subidón de deseo que me ha hecho sentir. Después de postre he pedido un trozo de pastel de chocolate y él se ha pedido un flan. En esos momentos flotaba de felicidad, entre el dulce chocolate y las miradas furtivas hacia él, estaba experimentando una felicidad increíble. Finalmente nos han traído los cafés y ambos coincidimos con un café solo. Me he fijado que adopta mucho una postura con las manos, como si estuviera rezando, a veces cerca de los labios y otras veces sobre el pecho. A las 14:30 ya tenía que marcharme y me he cruzado con Wolfgang, el camionero austríaco y me ha dicho en voz alta: Wie geht´s? Y yo le he respondido: Gut! Danke! Tschüss! No sé si mein Liebling se ha dado cuenta.