¡Hola mi dulce amor! Hoy cuando me he levantado por la
mañana, pensaba que tendría muy poco que explicarte, pero quería hacerlo pues
es una fecha muy especial para mí. Hace 9 años que te vi por primera vez, o que
nuestros destinos se cruzaron sin saberlo. Seguramente tú ya llevabas varios
meses en Barcelona, pero los duendes del destino fueron muy juguetones y
maniobraron para que yo te reconociera como un alemán guapo, luciendo la trikot
de la Mannschaft al día siguiente de que tu país ganara el mundial.
Ayer te puse el relato en el blog y notaba mi garganta irritada. Me fui a la biblioteca de 17 a 18h porque el viernes por la tarde está cerrada. No estaba muy motivada, te notaba distante y como si no pudieras conectar conmigo. Poco antes de salir de allí, me comenzó a doler bastante el corazón. A las 19h estaba en mi casa y volvió a dolerme el corazón y al ir a la toilette solté flujo transparente pero no parecía muy excitada como los últimos días. Justo al ponerte imágenes de Good Evening a las 20h, empecé a sentir un dolor intenso en la barriga. Intuía que estabas en algún lugar donde no te sentías cómodo. Notaba también la garganta irritada y eso significa que te estabas callando algo que no te atrevías a comentar para no molestar. Después de cenar, a las 21:20 regresó el dolor de barriga pero de forma más intensa. A las 22h me puse a ver un debate político muy interesante en la tele, pues estaban los partidos de izquierda, de derecha, los independentistas de Catalunya y Euskadi y el fascista que me sacó de quicio y me irritó bastante. De pronto a las 22:44 sentí tu súbita presencia y noté tu amor. Me levanté de la cama para darte besos y te dije T´estimo preciós alemany. Me fui a dormir a medianoche y te dije Gute Nacht mein Liebling.
Hoy me he despertado sin reloj y al mirar la hora eran las 06:18 y enseguida he pensado en ti y he sonreído. Te notaba lejos a pesar de todo y me dolía un poco la barriga. Me he duchado y te he puesto imágenes de Guten Morgen y cuando eran las 8:10 y estaba en la calle después de comprar el pan, he notado un estallido en el corazón. La verdad es que no podía dejar de pensar en ti, rememorando recuerdos memorables de hace 9 años. A las 8:36 estaba desayunando y he notado mucosidades en mi nariz y débiles love sparks en el plexo. He mirado las posiciones planetarias y tan solo había la cuadratura de Saturno. He mirado tu social media y te he puesto más imágenes y después he ido al banco con mi madre y mi hermano para acabar de gestionar los papeles de mi padre. Hemos estado una hora allí, hasta las 10h y después te he puesto más imágenes y me ha vuelto a doler la barriga. He ido a comprar con mi madre al supermercado y cuando eran las 10:30 he empezado a sentir un intenso arousal y sabía que me estabas buscando, que deseabas hacer astral sex, pero me llegaba el pensamiento que necesitabas más amor, besos y caricias que sexo y placer. He llegado a casa a las 11h y de pronto he estornudado 5 veces seguidas y me dolía un poco el corazón. Me he quedado sola en mi casa y he encendido una vela blanca y una varita de incienso de violeta. Al mirar la hora que era marcaba las 11:11 y te he escrito Ich liebe dich.
Cuando nos hemos visto, hemos hecho una postura misionero y tú estabas muy serio, un poco triste y parecías muy prudente, como si quisieras asegurarte de saber cómo me encontraba yo. Enseguida te he acariciado los cabellos y te he mirado con mucho amor en mis ojos y de repente la expresión de tu cara ha cambiado completamente. Has sonreído de felicidad, has suspirado y me has abrazado dulcemente y luego me has besado. Me penetrabas lentamente y tu Pimmel estaba duro y yo mojada, pero no estábamos al 100%. Pero ha sido como encender un fuego lento que pronto se ha convertido en llamas de pasión. Nos besábamos y tú te movías en círculos de manera muy profunda. Entonces he colocado mis piernas encima de tu espalda y nuestros cuerpos han estado muy a gusto juntos. Sin esperármelo, has comenzado a lamerme los pezones y he enloquecido de placer. He gemido fuerte tu nombre y te has dado cuenta. Cuando me has succionado los pezones como un bebé, yo estaba loca de éxtasis y te he dicho que era como si tuviera un cable conectado desde el clit hasta los pezones, pero sentía más placer en mis pechos que entre las piernas. Has estado mucho rato haciéndome gozar.
Después me has hecho sexo oral pero sin dejar de
tocarme y manosearme los pechos. Yo también te he hecho sexo oral, primero tú
estabas sentado y yo tumbada en el suelo y te he lamido el Pimmel y los Hoden
pero también te he hecho rimming de forma generosa. Tú gozabas mucho pero has
cambiado de posición y te has colocado de rodillas sobre mi cabeza, y me has
introducido de forma vertical tu Pimmel en mi boca. Hemos estado poco tiempo
pues tú deseabas que los dos disfrutáramos a la misma vez. Finalmente hemos
realizado una Doggy y tu Pimmel estaba más duro y la penetración era más
profunda. Tú me abrazabas y me besabas, te mostrabas muy dulce y cariñoso y has
notado que yo estaba muy mojada. Me has encontrado el punto G y el placer ha
aumentado mucho y apenas hemos resistido dos o tres minutos. Al final un
intenso orgasmo casi cósmico después de 14 minutos maravillosos. El número 14,
como hace 9 años cuando te vi por primera vez. Diez minutos después del clímax
he notado dentro de mí un amor inmenso. Al mediodía, después de ponerte
imágenes, he empezado a llorar sin poderlo evitar, pero era de felicidad y
emoción.
A las 13:12 he sentido muchísimo amor dentro de mí, era una especie de love bubble que subía y bajaba desde los chakras plexus & heart. Te he dado apasionados besos diciéndote Te amo y sé que has notado también mi burbuja de amor. Han venido mis tres sobrinos a casa para celebrar el cumpleaños de Martí y he mirado unas fotos que tenemos en el comedor donde ellos están con mi padre cuando eran pequeños, entre 2 y 6 años. Ahora ya tienen Martí 19 años, Simó 16 y Laura 15 y a menudo echo de menos esa época del pasado. Mientras tomaba el Afternoon Coffee he vuelto a sentir maravillosas love sparks, unas mariposas increíbles en mi plexo. Lo último que he anotado en mi colour note, ha sido después de lavar los platos. Había sonado A little pray for you y de pronto he recordado que el 14 de julio del 2015 te regalé el bolígrafo de München y me he visto sonriendo al recordar cómo me dijiste: Danke Schön. Pass auf dich auf mein Liebling. Te quiero mi precioso alemán.
Eternamente tuya,
No hay comentarios:
Publicar un comentario