No sé que está pasando

 

¡Hola mi dulce amor! Necesito escribir continuamente, pues cuando lo hago, es como si me metiera dentro de una burbuja rosa que me aísla del dolor, la pena, la incertidumbre que desde hace horas me envuelve. No tengo mucho que contarte hoy pero creo que a los dos nos irá bien, a mí escribiendo y a ti leyendo.

Ayer te puse el relato en el blog pero no sentí tu presencia hasta las 17h cuando miré tu social media y después me empezó a vibrar el corazón. No me apetecía mucho salir a la calle pero sabía que me iría bien. Fui hasta un parque que está cerca de la biblioteca, caminando en silencio entre árboles y plantas. Veía a gente con perros y pensé en Rufo, en lo que disfrutaría en este parque donde yo vivo que es mucho más grande del que habitualmente vamos él y yo. A las 17:43 me empezó a doler el corazón y todavía me dolía la cabeza de forma intensa. A las 18h decidí ir a la biblioteca pero tan solo para ir al lavabo y estar 15 minutos conectada. Me sentía completamente desmotivada, sin ilusión por nada. De regreso a casa pensé que podría empezar a escribir relatos de nuevo. Ya me gustaría escribir un libro como hace 10 años pero tendría que estar muy concentrada y sin distracciones.

Pero sí escribir relatos históricos, de amor, de sexo y no artículos que me llenan de alguna forma pero no es lo que más me gusta escribir. Tengo pendiente alargar el relato que hice sobre Bernard y Simonette en Carcassonne en el siglo XIII. Ya en casa conecté el ordenador y empecé a escribir sin parar sobre una historia de inteligencia artificial de algo que todavía no se había descubierto pero que cuando ocurriera, revolucionaría el pasado de la gente. A las 19:18 sentí mucho calor en mi cuerpo y mariposas en el plexo pero yo estaba concentrada en la escritura. Estuve más de 20 minutos tecleando todo lo que surgía de mi cabeza y fue una terapia fantástica. A las 19:53 me empezó a llorar el ojo derecho y sentí pena. Después de nuevo una drástica desconexión, no sentí absolutamente nada. Alrededor de las 21:15 me empezó a doler la barriga y mientras lavaba los platos, pensaba en un escrito de una compatriota tuya que me sirve de bálsamo y apoyo en los momentos donde me hundo y mi cabeza se llena de pesimismo.

Me dolía mucho la cabeza y tengo que estar desesperada para tomar un paracetamol pero la cefalea era muy intensa y poco a poco se fue calmando. A las 22h miré tu social media y yo encontré un video donde decía verdades muy crudas y duras que echaron más sal a mi herida del alma. A las 22:20 estuve mirando un channelling donde al parecer el DM le decía a la DF que estaba procesando las emociones, que no me sintiera culpable pero yo solo sé que desde hace dos años ya nada es igual y tampoco entiendo muy bien lo que está pasando. Como si me hubieras escuchado, a las 22:32 empecé a sentir nauseas, se incrementó el dolor de barriga y tuve ganas de vomitar. A las 22:44 me fui a dormir y por suerte esta vez, enseguida pude quedar plácidamente dormida.

Esta madrugada me he despertado a las 4 a.m y me dolía un poco la barriga pero cuando me he levantado a las 6:20 me dolía más. Me sentía muy agotada, como si no hubiera dormido nada. Me sentía desmotivada y pensaba que si estoy así ahora, cómo voy a estar a finales de mes con el eclipse y mercurio retrógrado. He ido a ver a los hermanos de Hans y me he sentido muy feliz. A las 7:33 he sentido un poco de dolor de corazón pero ha sido efímero. A las 8h te notaba triste y apagado. Me he dado cuenta que la luna está en tauro, tu casa 12 y a mí el signo de tierra tampoco me aporta nada. Cuando eran las 9:29 he notado una especie de opresión y ansiedad en el pecho. A las 10h he empezado a escribir en el ordenador y se me ha calmado el dolor de cabeza. Ha sido mágico. Después he ido a comprar con mi madre y a las 11 no podía dejar de pensar en ti y tú lo has notado, pues he sentido un poco de dolor en el pecho. He ido a comprar un diario que tiene las solapas de cartón como si fuera un libro antiguo, un códice. 

El 2 de marzo del 2009 empecé a escribir cada día, algo bueno que me hubiera pasado. Era una recomendación de un libro de metafísica que había leído anteriormente y me pareció una buena idea. A veces el día era caótico y entonces escribía que había salido el sol o había disfrutado de un café. Recuerdo que por esa época el Barça en la Champions estaba fatal y de pronto empecé a escribir en la libreta y comenzó a ganar y se alzó con la Champions de ese año 2009 y el primer triplete, así que imagina qué recuerdo tengo de mi primer diario de la gratitud. Desde entonces no he dejado de escribir ni un solo día, aunque sea una sola línea. Cuando te veía en el restaurante se me hacía difícil resumir las cosas buenas. Cuando he llegado a mi casa he conectado de nuevo el ordenador para escribir y he mirado tu social media. 

Me he acordado de un channelling que he leído hoy sobre “mood swings”* y que te pondré al final de la página. Te he puesto imágenes y a las 12:42 he sentido ganas de llorar de forma intensa. Notaba que estábamos conectando de nuevo. No he vuelto a sentirte de nuevo hasta las 15h cuando ya terminaba el Afternoon Coffee. He notado débiles love sparks y mi corazón vibrando mucho. Después estaba lavando los platos y a las 15:25 me ha empezado a doler intensamente el estómago. Al preguntarte qué te ocurría, de pronto en la radio ha sonado la canción “I´m blue” de Eiffel 65 y posteriormente no podía quitármela de la cabeza. Más que triste te noto enojado. Yo me siento rara, perdida y confundida y percibo que debo mantenerme alejada todavía para no complicar más algunas cosas.  Pass auf dich auf mein Liebling. Te quiero mi precioso alemán.

Eternamente tuya,

*This person is connected to your emotional world, senses your mood swings and always wonders how you are. So even if there is no communication, the bond is so strong that you are always connected. This spiritual connection is unbreakable, because hearts long for each other, regardless of time or distance. You both are sharing a deep love.