martes, 1 de noviembre de 2022

Diez minutos mágicos

 

¡Hola mi dulce amor! Comenzamos un nuevo mes, con la esperanza de que nos traiga buenos momentos y aleje las tristezas y preocupaciones. Hoy me he acordado de una frase de Paulo Coelho que dice: Solamente pasaba diez minutos con el amor de su vida, y miles de horas pensando en él.

Ayer me conecté muy poco el ordenador. A las 16h te puse el relato en el blog pero no sentí tu presencia. A las 17h había quedado con mi amiga Gemma, a la que conozco desde que teníamos 5 años y jugábamos juntas en la tienda de su abuela. También es la que se casó con un alemán rubio, de ojos azules y de Munich y tuvo una hija con él, que se llama Mireia. Las dos tenemos un amor imposible y la esperanza de volver a verlo algún día. Ella todavía sigue enamorada de un hombre que ahora tiene 52 años pero que conoce desde los 26. Parecía un amor de verano pero no se han olvidado. Los dos se casaron con otras parejas, tuvieron hijos y mi amiga se divorció de su marido alemán, pero su “amor secreto” todavía sigue casado. Hace 12 años que no lo ve pero descubrió algo sorprendente. Este chico tiene una hija que se llama Gemma, le puso su mismo nombre, pero también descubrió que la esposa de él se llama Mireia, igual que la hija de mi amiga. Estuvimos paseando y luego nos fuimos a una cafetería y cuando eran las 18h me empezó a doler el corazón y sabía que eras tú. Tuve la sensación que estabas leyendo el relato. Regresé a casa a las 18:45 y a las 19h sentí un fuerte arousal. A las 20:22 noté maravillosas caricias en los cabellos, pero a partir de las 20:40 me empezó a doler la barriga, con nauseas y me dolía el corazón. Sabía que no estabas solo pero no dejaba de pensar en ti. Después de cenar me puse la tele pero estaba tan cansada que me dormí viendo un episodio de House. Me desperté a las 23:20, te puse imágenes de Gute Nacht y me di cuenta que todavía me dolía bastante la barriga. Me costó mucho poder dormir una vez me tendí en la cama, hasta más allá de medianoche.

Hoy me he despertado a las 7h y me dolía un poco la barriga, la cabeza y tenía mal gusto de boca. Te he puesto imágenes de Guten Morgen y te he deseado un feliz martes. Cuando eran las 7:48 he notado tu presencia, me vibraba el corazón pero también sentía pena y unas fuertes ganas de llorar. Te he preguntado qué te ocurría y me he dado cuenta que era la misma hora que ayer. A las 8:35 estaba en la calle y había comprado el pan y me he dado cuenta que cada vez que pensaba en ti, notaba humedad entre mis piernas y un débil arousal. He desayunado y a las 09:09 después de ponerte más imágenes, de repente he notado durante breves segundos, una burbuja de amor y te he gritado telepáticamente: Quiero amarte. Al mirar el calendario me he dado cuenta que hoy es una fecha curiosa, pues tiene tres 111 y tres 222. A las 9:23 de nuevo he sentido muchas ganas de llorar y he estornudado tres veces. Estaba en mi casa pero no sola y era un verdadero reto hacer astral sex pero te deseaba muchísimo. A las 10:43 he encendido una vela rosa y una varita de incienso de chocolate y a las 10:47 he comenzado, sin imaginar que serían diez minutos increíbles, maravillosos, llenos de bliss, Heaven on Earth.

Cuando nos hemos visto, yo estaba sentada en una butaca y tú de rodillas y me penetrabas muy lentamente. Yo estaba muy húmeda y tú muy excitado. Pronto nos hemos abrazado y besado y nos mirábamos con muchísimo amor. Tú estabas triste pero tus ojos brillaban cuando me mirabas. Una bliss y energía eléctrica nos ha rodeado y ambos sentíamos mucho placer. Te movías en círculos y la penetración era muy profunda. Yo no dejaba de besarte y acariciarte los cabellos y de repente hemos sentido una felicidad inmensa, cuánto más nos abrazábamos y unidos estaban nuestros cuerpos, más bliss sentíamos. Era mágico y maravilloso. Tú abrías y cerrabas los párpados lentamente y los dos gozábamos mucho. Yo no podía gemir en voz alta pero la sensación era fantástica.

Después hemos hecho una rear entry los dos de rodillas y tú has realizado thrusts más rápidos y profundos mientras me tocabas los pechos y me besabas en la nuca. Yo he gemido tu nombre en voz baja y notaba tu Pimmel más grueso y yo más húmeda. Continuaba aquel halo de felicidad y hemos estado a punto de llorar de emoción por lo que estábamos sintiendo. Era una mezcla increíble de placer intenso y amor inmenso. Finalmente un magnífico orgasmo donde he gemido encima de la almohada. Cuando me he levantado de la cama, todo mi cuerpo estaba lleno de energía, todavía podía notar tu cuerpo astral, tu amor. Me he quedado dizzy físicamente y mentalmente también. A los 15 minutos del clímax, todavía sentía como si me estuvieras abrazando. Ha sido mágico. Gracias, Danke mi precioso alemán.

Pasado mediodía, a las 12:20 me ha empezado a llorar el ojo derecho. Más tarde, a la hora mágica de las 13:18 he notado tu presencia, la sensación que me estabas abrazando y mucho fuego en mi plexo. Incluso minutos después he vuelto a sentir arousal. Mientras estaba comiendo a las 14:24 me ha empezado a doler un poco el corazón y después con el Afternoon Coffee a las 14:54 mi corazón palpitaba rápido y me vibraba y sentía excitación. Lo último que he anotado hace pocos minutos, es que me duele mucho la cabeza. Me gustaría poder sentirte más, eres mi medicina, mi vitalizante de energía y alegría y espero que yo surja el mismo efecto en ti. Pass auf dich auf mein Liebling. Te quiero mi precioso alemán.

Eternamente tuya,

 


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