La realidad supera mi fantasía

¡Hola mi dulce amor! Nuestras almas ya no podían más. Aunque nuestros cuerpos estén en la 3D, ellas necesitan amarse y abrazarse. Y ahora entiendo porqué estás así, porque estamos así, porque lo que sientes tú también lo percibo yo.

Ayer por la noche imaginé una fantasía contigo. Hacía mucho que no lo pensaba antes de ir a dormir, pero las imágenes me hicieron sentir bien y luego me quedé dormida. Me imaginé que nos encontrábamos en los alrededores del campo de fútbol de mi equipo y yo te abrazaba fuertemente. Entonces nuestros chakras se conectaban y nos invadía una ola de deseo, de amor desesperado…y nos refugiábamos en un lavabo para “merging standing”, un quickie que nos llenaba de fuego y pasión. Esta mañana al despertarme, no estaba muy animada y al mirarme en el espejo he pensado que sería demasiado fácil para el universo. Si nos encontramos, será una sorpresa inesperada.

Sentía los ojos llorosos y creía que era el champú pero notaba una vibración en el corazón y sabía que venía de ti. Eran las 9:30 cuando estaba en la terraza con los gatos, cuando me ha venido un pensamiento muy fuerte y te he dicho telepáticamente: Alguien te está robando tu energía. Por eso te sientes cansado, malhumorado, desmotivado. Sólo tú puedes saber quién es. A los pocos segundos se ha posado sobre la antena, una tórtola (símbolo del amor eterno) y le he dicho: Dile que lo amo, que le envío fuerza y luz para se sienta mejor. Pocos minutos más tarde he empezado a sentir deseo y excitación en el sacra que no sentía desde el lunes. Después se me ha activado el corazón, he sentido fuego en el plexo y finalmente el tingling en los pies. Te aseguro que he sentido muchas ganas de merging with you.

Ya en mi habitación he encendido una vela rosa y una varita de incienso de orquídea que también es rosa (el color del amor incondicional) y te he besado. Ha sido maravilloso vida mía. Te he pedido hacer mi fantasía de ayer, los dos de pie y cara a cara pero apenas hemos aguantado dos minutos, tú tenías otros planes. Hemos hecho la Doggy y estabas muy apasionado, mordiéndome la nuca y cogiéndome de los cabellos para besarme mejor el cuello. Eran tan potentes tus penetraciones, que mis pechos se movían como si fueran campanas. Veía tu cara, con los ojos cerrados y la lengua asomando entre tus labios, y yo con la cabeza ladeada y los ojos semi-cerrados. El placer era intensísimo. Todo mi cuerpo vibraba, quemaba, cosquilleaba con el placer. Después te has acercado a mi oído derecho y me has dicho ronroneando 4 veces mi nombre y he entendido que me decías: Ich bin Verrückt. Al escuchar las palabras en alemán, me he excitado muchísimo, mi cuerpo ha reaccionado con una subida importante de placer y te he dicho: Sprich mir in Deutsch (Ahora sé que lo correcto sería Sprich mit mir auf Deutsch). Entonces has empezado a hablar en tu idioma nativo pero solamente he entendido la palabra Herz. Me daba igual, me excitabas muchísimo. Era como si mi subconsciente recordara que en ese idioma sentí mucho placer, seguramente en la última vida. Poco después me has besado de manera muy intensa y me has dejado “estabornida” (No sé como traducir esta palabra, aturdida, Stunned…). Te he dicho “Deine Zunge, Dein Mund…” Era todo muy intenso, incluso notaba tu Pimmel como más hinchado y sentía muchísimo placer. Te he lamido los dedos más allá de los nudillos (Knuckles) y precisamente esos “Fingers” después me han acariciado el clit mientras me penetrabas con fuerza, provocando que me volvieras loca de placer, no podía dejar de gemir, de gruñir por este intenso goce. Hemos disfrutado de un maravilloso orgasmo que te aseguro, mein Liebling, que ha borrado mucha negatividad y dolor. De hecho durante un par de horas te he notado relajado, con paz interior.

Pero eran las 12:30 que estaba tomando un té y hablando con una camarera con la que tengo mucha confianza y me comentaba sobre el problema que tenía con una compañera de la cafetería, envidia, le producía dolor de cabeza y malestar. Entonces he sentido mis ojos llorosos y mucha tristeza y durante varios minutos pensaba que había captado la energía de la camarera, pero iban pasando los minutos y no desaparecían los síntomas. Te he pedido una señal para saber si esa tristeza provenía de ti…Diez minutos más tarde he empezado a sentir dolor en el pecho y el corazón.

Ahora me doy cuenta, que la camarera ha sido una canalizadora, me ha enviado un mensaje de lo que te está ocurriendo a ti…Cariño, mein Schatz, te envío mucho amor y fuerza, aunque tampoco estoy muy animada, pero no te dejaré solo amor mío, te daré besos y te diré palabras bonitas para “cheer you up”. Mein Gott, todavía puedo sentir el gusto de tu boca…ICH LIEBE DICH ÜBER ALLES SCHNUCKI”.

Eternamente tuya,