Eres increíble, mi dulce amor

!Hola mi dulce amor! No sé describir lo que me está pasando, lo que nos está pasando però es increíble. Cuando aquel 22/2/16 sentí un orgasmo cósmico, pensé que jamás volvería a sentir otro, però me equivocaba.

Hace poco más de una hora estaba comprando en La Sirena, una tienda de productos congelados y estaba fresquita. Pues de pronto me he sentido como una antorcha humana. Los tres chakras se han activado muchísimo y de pronto he sentido puro fuego en el pecho, entre las piernas, en los brazos...Visionaba mi corazón y estaba envuelto en llamas. He pedido una señal y poco antes de llegar a casa he visto una matrícula con las iniciales de tu nombre, apellido y una D de deseo, desig, desire...Por cierto, ayer pedí otra señal y empezó a sonar Sexual Healing de Marvin Gaye. Más explícito no podía ser.

Cuando después de besarte dulcemente te he preguntado si querías hacer el amor, de repente he notado como mi corazón se aceleraba muy rápido durante 5 segundos. !Me escuchas! De nuevo has elegido una postura muy placentera y profunda y sabes que me gusta porque te pido que me beses. Me gusta tu boca, tu lengua, tus besos salvajes...

Mi cuerpo ardía, el corazón palpitaba muy deprisa y en tus ojos veía deseo, amor, complicidad, hoy se te notaba feliz y muy cariñoso. Me he visto mi cara también y las pupilas estaban dilatadas de deseo. Lo sentía todo, mi placer, el tuyo, cómo empujabas, me besabas y me abrazabas el cuello. Lo más increíble es que ahora el placer se alarga, no se acaba nunca, es interminable y delicioso.

Cuando hemos llegado al clímax, el orgasmo ha sido tan fuerte que me convulsionado durante varios segundos y he gritado tu nombre mientras tocaba el cielo con las manos.

!Oh, son las 11:11! Antes he visto una Marienkäfer. Sólo deseo que seas feliz amor mío y que no pierdas tu bonita sonrisa.

Te deseo un buen fin de semana. Gracias, Danke por hacerte tan feliz. Te quiero.

Eternamente tuya