La ciudad que nos marcó para siempre

¡Hola mi dulce amor! Tu alma lo recuerda todo. Quizás no sabes por qué estás triste o alegre pero ayer descubrí algo que quizás te ayude a comprender.
Por la mañana estaba normal, ni eufórica ni triste. Nada más bajar del autobús para ir a clase, de pronto empecé a sentir una profunda tristeza, una añoranza muy fuerte y me senté en un banco de la calle para escribir en la colour note: I miss you like crazy. Sospechaba que eras tú pero no entendía qué te ocurría, ya que el lunes fue maravilloso, sintiendo una bubble love y amándonos con sacred love. Poco después ya tuve que entrar a clase y me concentré escuchando y apuntando explicaciones de mi profesor.

Era mediodía cuando estaba atenta a la pantalla donde nos proyectaban las flores de Bach, cuando primero sentí como una opresión en el pecho, me faltaba aire y cinco minutos más tarde empecé a sentir mucho dolor y ganas de llorar. En medio de los apuntes escribí sin pensar: It is an excruciating pain. ¿Qué te ocurre amor mío? ¿Por qué estás tan triste? No podía consolarte ni darte besos y tuve que esperar cuando fui a comer para besarte y animarte.

Dos horas más tarde creo que descubrí la razón de ese dolor…Sospecho que estás en una ciudad que significó mucho para nosotros hace 76 años y donde en la última vida nos despedimos. Pero antes de comentarte esto, te contaré que me ocurrió por la tarde. Estuve en la biblioteca navegando por internet y una hora más tarde salí. De la biblioteca a mi casa hay 20 minutos caminando, y cuando llevaba 5 minutos por la calle, sentí una fuerte excitación y también el chakra raíz. No notaba el corazón pero creo que no lo activaste para no sentir tu dolor. Era tan fuerte el deseo que cogí un autobús para llegar antes a casa. Me moría de ganas de amarte, de sentir tu cuerpo, tu amor…
Cuando cerré los ojos llegaste muy rápido y estabas muy apasionado. Me besaste con una impetuosidad que me dejó breathless…Nuestras bocas se devoraban, se mordían, eran besos salvajes. Me he dado cuenta que las últimas veces me quieres mirar a la cara y me gusta. Me volvías loca de deseo y placer. Nuestros cuerpos ardían tanto que incluso percibí que tenías la frente perlada de gotitas de sudor. De nuevo el éxtasis era de otro mundo y una hora después del clímax, todavía sentía excitación dentro de mí. Fue maravilloso y me di cuenta que sentías que te amaba, que te miraba con cariño y eso es lo que necesitabas. Gracias, Danke mi vida.

Y he dejado para el final la sensación que estás viviendo un trigger, o un dejà vu. A mí me pasaba cuando iba en Munich, a veces estaba muy contenta y otras me hundía de dolor y me di cuenta que era dependiendo de la zona. En julio del 2013 visité la ciudad suiza y cuando vi los tranvías con las campanitas, me trasladó a los años 40. Fue una sensación muy intensa. Me alojé en el hotel Best Western cerca del Rhein y una noche me desperté a las 4.44 de la madrugada después de soñar que veía una nota que ponía “Noch bleibst”. Y descubrí tres lugares de la ciudad que me marcaron y que después plasmaría en mi libro un mes más tarde. El primero fue la Münster y supe que allí Felix fue a buscar consuelo por tanto dolor. El río Rhein me producía malestar y supe que él había intentado acabar con su vida en un acto de desesperación. Y el lugar más triste fue la Bahnhof. Cuando caminaba por allí, todavía veía a Hans y tuve un shock muy fuerte. Pensaba que ellos se despidieron con un abrazo aunque se morían de ganas de besarse y nosotros hace casi 4 años también nos abrazamos. Qué curioso. Sabía que era doloroso ir allí pero mi alma me lo pedía.

Piensa amor mio que eso ya pasó pero para nuestras almas han quedado recuerdos, tanto buenos como malos. Por cierto, una sincronicidad. El lunes vi a dos hermanos con la camiseta de tu equipo de fútbol y ayer justo cuando esperaba el bus, vi otro chico con esa trikot que me hizo sonreír. Justo cuando pensaba en ti y me moría de ganas de amarte astralmente.

Espero que todo vaya muy bien y sonrías con tu preciosa boca que me vuelve loca.
TE AMO

Eternamente tuya,